Tras largos años optando por el galardón más prestigioso de todos los otorgados por la industria del cine, Leonardo DiCaprio al fin lo ha logrado, y ha sido recompensado con el Oscar a Mejor Actor por El Renacido. Éste era un momento enormemente esperado no sólo por él mismo, sino por miles de fans a lo largo del mundo que han hecho de la lucha del intérprete por conseguir el premio uno de los grandes puntos de interés de la gala de 2016, sino el que más.
DiCaprio ya partía como favorito gracias a su visceral interpretación en la película de Alejandro González Iñárritu que, pese a obtener los premios a Mejor Fotografía y Mejor Director, ha acabado viendo cómo el galardón a Mejor Película iba a parar a manos de Spotlight, de Tom McCarthy. El actor, que ya había sido nominado por su trabajo en hasta cuatro ocasiones, cinco si tenemos en cuenta esta última, ha subido a recoger la preciada estatuilla entre los aplausos de toda la platea, y ha realizado un emotivo discurso en el que se ha acordado tanto de su compañero Tom Hardy -nominado a Mejor Actor de Reparto-, como de Martin Scorsese -que le ha dirigido en cinco películas-, como del cambio climático, una de sus grandes obsesiones.
Pese a la gravedad de sus palabras, todos nuestros ojos han preferido reparar en la reacción de Kate Winslet, su compañera de reparto en Titanic, que parecía tanto o más emocionada que él.
Por otro lado, la ganadora a Mejor Actriz ha sido Brie Larson por La habitación, mientras que Alicia Vikander y Mark Rylance han visto cómo su trabajo en La chica danesa y El puente de los espías eran merecedores de los Oscar a Mejor Actriz de Reparto y Mejor Actor de Reparto, respectivamente.