El cuatro veces nominado a la Palma de Oro en Cannes Hirokazu Koreeda (Tokio, Japón, 1962) regresa al cine este miércoles 23 de marzo con su última película, Nuestra hermana pequeña, basada a su vez en el manga Unimachi Diary de Akimi Yoshida. Después de obras maravillosas e indispensables como After life (1998), Nadie sabe (2004), Still Walking (2008) y De tal padre, tal hijo (2013), Koreeda -que estrenará este año Umi yori mo mada fukaku- incide en su estilo de pausas y tiempos largos y ambientes familiares e intimistas con esta deliciosa historia sobre la vida de tres hermanas que viven con su abuela y que, tras la muerte de su padre -al que no veían desde hace 15 años-, conocen a su media hermana.
La mayor Sachi (Haruka Ayase), enfermera y la más seria y responsable de todas; Yoshino (Masami Nagasawa), empleada de banca, enamoradiza y muy dada a las locuras, sobre todo cuando bebe; Chika (Kaho), de 19 años, que trabaja en una tienda de deportes, y Suzu (Suzu Hirose), la medio hermana, todavía en el instituto y muy buena jugando al fútbol. Sepas o no quién es Koreeda, tienes que verla.
Sus películas son obras originales o bien están inspiradas o parcialmente inspiradas en sucesos reales. ¿Cómo surgió la idea de adaptar al manga Umimachi Diary de Akimi Yoshida?
Es verdad lo que dices. Normalmente siempre escribo yo y no cojo ideas de otras cosas. Pero, en primer lugar, soy muy fan de Akimi Yoshida; compro todos sus mangas, y me encanta. En 2007 salió el primer volúmen de Unimachi Diary y me enamoró. Últimamente, en Japón, hay muchos mangas que después se convierten en películas. Y yo pensé: "No quiero ver una película de Unimachi Diary con otro director. Quiero hacerla yo" (Risas).
Las relaciones familiares -y su ausencia- son muy importantes en su filmografía. ¿Por qué?
Nadie sabe (2004) narraba la historia de unos niños abandonados y, en cierto modo, Nuestra hermana pequeña cuenta la vida de tres hermanas 'abandonadas' por su familia. Y esas tres hermanas acogen a su vez a su media hermana, otra chica 'abandonada'. Y todas viven juntas. Ese fue uno de los motivos por los que me gustó tanto ese manga. Porque se parece mucho a Nadie sabe, pero es un poco diferente. Igual esta vez no es una película típica y familiar. El título original quiere decir Diario de una ciudad al lado del mar. No sólo quería centrarla en las relaciones familiares, sino también en su casa, el tiempo...
En el manga, Suzu tiene más peso. Pero aquí la protagonista es Sachi, la hermana mayor...
Puede ser... Pero el manga original no sólo se centra en Suzu, la pequeña. Funciona como un diario y, dependiendo del episodio, habla de Sachi, la mayor; del amigo de Suzu... Va cambiando. No hay una protagonista absoluta. Es muy difícil hacer una película con tantos personajes, así que elegí a algunos. Y esta vez, para mí, las protagonistas son Sachi, la mayor, y Suzu, la pequeña. La mayor tiene unas emociones muy complicadas y quería profundizar en su intento por perdonar a su padre y a su madre y esa constante lucha. Y Suzu también lucha lo suyo, ya que se pregunta cómo seguir adelante.
La película plantea una interesante pregunta: ¿Son nuestros padres culpables de nuestras flaquezas y de nuestro destino o somos nosotros mismos los únicos responsables?
Yo también lo he pensado a veces en mi vida... Es difícil. Hay que aceptar lo que se tiene pero no desde el victimismo. Por ejemplo, creo que en la película ninguna de las cuatro hermanas se sienten como víctimas por culpa de su padre. Y hasta la mayor, Sachi, llega a decir que este era una "persona cero" pero muy amable. Es una frase muy importante. Imagina su fuera al revés: "Era muy amable pero una "persona cero". Acaba aceptando cómo era su padre y lo hace con agradecimiento.
En Cannes, además de a Naruse y Ozu, mencionó a Ken Loach como referente. ¿Cómo?
Igual no he dicho que me parezco a él. Le tengo mucho respeto. Pero es verdad que en sus películas no hay heroínas. Puede que en ese sentido se asemeje también a Naruse. Siempre que hago una película me imagino a Naruse. Pero esta vez no sólo en las relaciones personales, sino también el lugar: Kamakura. Quería descubrir la ciudad y explorar el tiempo que pasan los personajes. Estilo Ozu.
Vuelve a analizar tradición y modernidad, por ejemplo en la escena en la que Suzu se pone delante del ventilador ¿Se siente más conservador con los años o más atrevido?
Personalmente, es verdad que me gustan las cosas tradicionales. Aquí lo vemos en la casa, que es muy antigua, y también en lo que hace cada año la familia, como el licor de ciruela. Hay cosas como estas que en Japón apenas se hacen ya. Se están perdiendo. Sachi, por ejemplo, lo que quiere es emular la tradición de su abuela. Tiene conflictos con sus padres, pero adora a su abuela, que era profesora.
También se habla mucho de la gastronomía. ¿Un método indirecto para hablar de la familia? Y sobre la muerte. ¡Hay dos funerales y un aniversario de otro fallecimiento! ¿Le obsesiona?
Es verdad. La gastronomía no sólo funciona como concepto familiar. También es importante la ciudad y la ciudad tiene un sabor y una tradición propios. Y sobre la muerte... Creo que me gustan mucho los funerales (Risas). No son cosas puramente tristes. Y como has dicho, hay tres en esta película: el del padre para las cuatro hermanas, el aniversario para la familia y otro para la ciudad. Son distintos.