Así luce en la actualidad el ganador del Oscar por Gladiator, aunque Crowe es muy dado a los cambios de peso, por lo que puede volver a parecerse a su yo de hace una década. Para la película de Ridley Scott, el actor trabajó duramente en el gimnasio y ganó músculo. En cambio, para Red de mentiras engordó 23 kilos.
El actor de El lobo de Wall Street es otro de los que no para de subir y bajar de peso. Cuando comenzó a ser famoso, Hill tenía cierto sobrepeso, algo que cambió drásticamente en 2011. Tras esto, volvió a ganar unos kilos para la película War Dogs y, posteriormente, volvió a perderlos.
Hace 10 años, Momsen ya había aparecido en películas como El Grinch, Spy kids 2 o Hansel & Gretel y estaba a punto de protagonizar Gossip Girl. En 2011 dejó el mundo de la actuación para centrarse en su grupo, The Pretty Reckless.