Este viernes 8 de abril se estrena en España El novato, una comedia francesa dirigida por el joven realizador Rudi Rosenberg, quien debuta con su primer largometraje ganándose el apoyo del público y el premio Kutxa-Nuevos Directores del Festival Internacional de cine de San Sebastián en su pasada edición.
Una historia centrada en la mágica etapa de la adolescencia en la que Benoit (Réphael Ghrenassia), un chico de 14 años que acaba de mudarse a París, tendrá que poner todo de su parte por intentar hacer amigos en su nuevo colegio, pero no será tan fácil. Aunque trata de acercarse a los más populares, estos le dan la espalda, por lo que decide, animado por su tío, organizar una fiesta en casa con el objetivo de conocer a más gente. Él ansía que acuda Johanna, la chica de la que se ha enamorado, pero al evento sólo asisten los marginados de la clase, sin embargo, juntos se entienden y se divierten, algo que a Benoit le hará reflexionar sobre el valor de la verdadera amistad. SensaCine ha tenido la oportunidad de entrevistar al guionista y director en su reciente visita a Madrid, y esto es lo que nos ha contado.
¿Qué hace que El novato sea una película diferente a otras comedias con tópicos sobre adolescentes? ¿Cuál ha sido el mensaje que ha querido transmitir?
En esta película se toca un tema esencial que me parecía muy interesante abordar. A menudo solemos sentirnos atraídos por la gente que goza de popularidad y dar de lado a los que consideramos marginados, pero que realmente son los que cuentan para nosotros. Es un fenómeno que ocurre mucho en los colegios y, personalmente, no me gusta nada. El hecho de hacer lo mismo que los demás, copiar sus comportamientos solo para sentirnos aceptados, nos lleva a ser quien no somos, a no reflexionar por nosotros mismos. Con esta comedia, aunque es algo muy serio, lo he querido tratar con humor y al mismo tiempo me ha servido para recordar muchas anécdotas de mi propia adolescencia y hacerlo lo más auténtico posible.
Ya tiene experiencia en esto de rodar con gente joven, pues también trabajó con adolescentes dirigiendo los cortometrajes 13 ans y Aglaée, ¿qué ha aprendido de ellos?
He aprendido que no debo volver a grabar una película con adolescentes porque es una pesadilla… No, es broma (Risas). Más bien todo lo contrario, para mí es verdadera pasión la dirección con este tipo de actores. Tan jóvenes y con tanta frescura. Tienen una torpeza delante de la cámara que en el fondo es extraordinaria, olvidan por completo que está ahí porque sencillamente les da igual y, para mí, no hay nada más preciado que un actor que no tiene conciencia de la cámara.
Benoit, el protagonista, es un personaje con mucha fuerza y carisma en esta historia ¿qué destacaría de él y en qué se siente identificado?
Benoit es el personaje más neutro. Por así decirlo, es el único ‘normal’, aunque no me gusta mucho el término, pues el resto de los chicos tiene algo diferente que les hace ser los ‘raros’ y no terminar de encajar en ningún grupo. Efectivamente, coincido en muchos rasgos con este personaje. Cambié de colegio en muchas ocasiones y comprobé lo duro que era tratar de integrarse y el malestar que se siente al querer gustar a los demás. No eres tú mismo y esto me parecía un buen terreno para la comedia.
Se trata de un guión lleno de chispa y puntos de humor, divertido y que además invita a la reflexión, ¿cuánto tiempo le llevó escribirlo?
Estuve varios años reuniendo las principales anécdotas de esa etapa de mi adolescencia, cuando me venían a la mente las anotaba en un cuaderno hasta que un día me lo puse todo delante y dije: con esto, ¿qué puedo contar? Me lo tomé con calma y a raíz de ahí surgió este proyecto.
De todas las escenas de la película, ¿con cuál se queda?
Buena pregunta. Casi nunca estoy satisfecho con el resultado porque siempre tiendo a pensar que se puede hacer mejor. Me cuesta mucho tener distancia con lo que hago y al final la opinión que tengo de mi trabajo depende en gran medida de la reacción que haya tenido en el público. La escena en la que los chicos están de fiesta en casa de Benoit sé que ha sido de las más comentadas por los espectadores, parece que ha gustado mucho, así que me quedo con esa.
Ha podido ejercer su profesión en varios ámbitos, primero actor y ahora guionista y director, ¿qué le gusta más?
Sin duda me quedo con la labor de director. Yo fui actor cuando era adolescente pero de la noche a la mañana lo dejé para dedicarme por completo a la dirección de actores, que es lo que realmente me entusiasma.
¿Qué nuevos proyectos tiene en mente?
Todavía no he encontrado un nuevo tema que me aporte la energía necesaria para volver a arrancar con algo. Estoy esperando esa inspiración. Mientas tanto, hago publicidad y también comedia. Me gusta porque me permite mantener siempre el pie en el estribo.