No todos los grandes 'blockbusters' que se estrenan próximamente estarán protagonizados por superhéroes, pues también tendremos oportunidad de ver cómo Duncan Jones (Moon) ha trasladado el mundo y los personajes del videojuego World of Warcraft a la gran pantalla. De este modo Warcraft: El origen no sólo se propone ser un éxito, sino que también tiene el propósito de demostrar que las palabras "adaptación de un videojuego" no tienen por qué ser siempre un sinónimo de "fracaso en taquilla", como muchos piensan en la industria tras los estrenos de filmes como Street Fighter, Dead or Alive, Tekken o Super Mario Bros, entre muchos otros.
Según recoge en exclusiva Screen Rant, Jones y el actor Robert Kazinsky -que en el filme da vida a Orgrim el Orco mediante la técnica de captura del movimiento- se dejaron caer por la pasada PAX East 2016, la convención multitudinaria de los videojuegos, con la intención de dar nuevos detalles sobre Warcraft: El origen. En ella defendieron su nuevo proyecto, además de afirmar ser conscientes de la mala fama que tiene este tipo de películas. Éstas fueron, concretamente, las palabras de Kazinsky.
Las películas basadas en videojuegos, históricamente... suelen apestar. Asumidlo, lo hacen. Nadie va a discutir sobre la película de Mario Bros. Y esto se debe a que los videojuegos han evolucionado. Antes, siguiendo con el ejemplo de Mario Bros, lo único que tenías que hacer era salvar a Peach, por lo que los guionistas se preguntaban '¿cómo voy a hacer una peli de 90 minutos con esto?', y al intentarlo les acababa saliendo un argumento horrible".
El director, por su parte, se mostró más comedido, y quiso convencer al público de que, en esta ocasión, la película resultante merecería la pena. Para ello no dejó de alabar el papel de Blizzard, la desarrolladora de videojuegos que hay tras World of Warcraft:
Lo que mejor hace Blizzard es tomar cosas que conoces bien, como las historias de Tolkien o el universo de Star Wars, y convertirlo en algo totalmente nuevo. Así, lo más interesante de WOW es la idea de que haya héroes en ambos bandos, y que ninguno de ellos se identifique con el bien o con el mal. Hay diferentes perspectivas, y todos tienen sus motivos para una guerra que es inevitable".
No cabe duda de que los responsables de Warcraft: El origen han puesto un especial cuidado en el diseño de la historia, procurando que sea lo suficientemente compleja y atractiva como para desmarcarse de todas aquellas malas adaptaciones de videojuegos a las que Kazinsky hizo referencia. El filme, que también protagonizan Travis Fimmel y Toby Kebell, y que narra el conflicto bélico entre los orcos y los humanos -sin, por lo que parece, favorecer a ningún bando en particular-, se estrena este 3 de junio, y aquí puedes ver su tráiler: