Este viernes 17 de junio se estrena en cines la nueva historia del matrimonio Warren, Lorraine y Ed, Expediente Warren: El caso Enfield. Un nuevo caso en el que los investigadores paranormales tienen que luchar contra un espíritu maligno. Al igual que en la primera parte, esta historia está basada en un caso real al que ambos tuvieron que hacer frente, el poltergeist de Enfield.
El caso está protagonizado por una familia integrada por una madre y sus cuatro hijos, dos chicos y dos chicas: Margaret de 13 años, Janet de 11, Johnny de 10 y Billy de 7. Juntos viven en Enfield, al norte de Londres, en concreto en Green Street, en una zona residencial cerca de la que se encuentra el colegio de los pequeños.
Según reveló la madre, Peggy Hodgson, todo comenzó la noche del 30 de agosto de 1977. En ese momento, su hija Janet le contó que tanto su cama como las de sus hermanos temblaban mucho. La noche siguiente, la señora Hodgson escuchó un ruido muy alto procedente de las escaleras, y cuando entró en el dormitorio de sus hijos vio la cómoda moverse para encerrarles dentro de la habitación, la mujer intentó pararlo pero parecía que una fuerza invisible estaba moviendo el mueble.
Además, todos afirman haber escuchado un ruido constante procedente de las paredes de la casa, incluso su vecina, Vic Nottingham, que ayudó a la familia con estos sucesos paranormales, lo confirma. La policía también acudió a la casa ante la llamada alarmada de la familia, confirmando también los ruidos a la par que vieron una silla moverse sin que, aparentemente, nada ni nadie la moviera.