Tras el éxito en 2003 de Buscando a Nemo, que a punto estuvo de recaudar la friolera de 1.000 millones de dólares en la taquilla mundial, su continuación Buscando a Dory llega a las salas españolas este miércoles 22 de junio. En SensaCine tuvimos la oportunidad de visitar en abril las oficinas de Pixar Studios en Emeryville, California, y, además de contarte 12 curiosidades de la secuela comentadas por sus creadores, también hemos podido hablar con dos de los animadores hispanohablantes que han participado en la creación del filme: el español Juan Carlos Navarro y la argentina Carolina López Dau.
"Cuando entras en el estudio, dado que es como una comunidad de artistas, te das cuenta de que hay una afinidad con las personas que están aquí", nos cuenta el alicantino Juan Carlos Navarro, que lleva trabajando en Pixar desde febrero de 2010. Se licenció en Económicas en su tierra y después se mudó a Inglaterra para estudiar un master en la Universidad de Leicester. Allí vio un autobús que promocionaba Toy Story y algo le cautivó. Un año después se trasladó a EE.UU y ahorró dinero como banquero para graduarse en Bellas Artes. Empezó con series y películas y, con el tiempo, acabó en Pixar Studios.
La ilusión que desprende Navarro es infantil y contagiosa. Y por encima de todo, lo que subraya es que Pixar es un espacio creativo que alimenta tanto tu concentración como tus pasiones. "Entre todos nos elevamos. Hay una tendencia a comprometerse con lo que decides hacer". Aunque ya ha trabajado previamente en títulos como El viaje de Arlo, Buscando a Dory ha sido su estreno en la compañía en una posición de liderazgo, en concreto como Animation Fix Lead. "Un privilegio". Su labor ha consistido en animar sus escenas pero también en dirigir a un equipo de entre cinco y seis animadores para apoyar al departamento y reflejar en pantalla la sensación de cómo se mueve un pez dentro del agua.
Un paraíso laboral
Las oficinas incluyen gimnasio, campo de fútbol, sala de masajes, barbacoa, piscina, mesas de ping pong, hamacas... ¿No se corre el peligro de volverse un 'workaholic'? "Hay un horario de nueve a seis porque también es importante apoyar a las familias y a la estructura que tienes en casa", opina Navarro. "Pero todo está enfocado a que tengas un entorno en el que te sientas bien. El estudio está abierto 24 horas al día y, con tal de que termines tu trabajo, tienes flexibilidad. Creamos y jugamos juntos".
La libertad de este paraíso laboral también se encuentra en los despachos. "Cada uno hace su oficina como quiere: uno tiene un castillo, otro un avión que acaba de estrellarse en la jungla, videojuegos...". Para Carolina López Dau, bonaerense de nacimiento pero criada en España, que el entorno sea tan 'friendly' tiene una explicación clara: “Cuidan mucho al empleado”. Ella entró en Pixar en enero de 2011 y Dory es su segunda película como animadora de personajes principales. "He animado a Dory, a Marlin y a Nemo al principio de la película, y son unos personajes adorables. También a los humanos del Instituto Marino. Se necesitaba a alguien que animara masas de gente y yo tenía experiencia. Es alucinante animarlos. Ni me lo hubiera imaginado cuando vi Buscando a Nemo con 18 años".