De entre todas las historias tristes del Titanic que retrató James Cameron en su famosa película, la de la banda de música sigue siendo una de las que más emociona a los espectadores. A pesar de que el filme cuenta con personajes inventados, ese grupo de música realmente existió y siguió tocando hasta que el agua llegó hasta ellos. Todos tuvieron el mismo trágico final, pero John Law Hume, el violinista, tuvo una vida digna de película de Hollywood.
En septiembre de 2015, el nieto del músico reveló en los medios cómo descubrió que su abuelo tenía dos familias. En un intento por saber más acerca de sus antepasados, Christopher Ward comenzó a buscar datos acerca del famoso violinista a través de un coleccionista de objetos del Titanic. Éste tenía un documento que mostraba las personas que se habían beneficiado de la pensión de Hume después de que éste muriera. Una de ellas era Mary Costin, la prometida con la que esperaba un hijo, y la otra era Ethel McDonald, una total desconocida para Ward.
Siguiendo la pista de este documento, descubrió que McDonald recibía su pensión en Jamaica, lo que le recordó que su abuelo había trabajado tres meses en un hotel del país. Tras contactar con una genealogista jamaicana, descubrió que la mujer que buscaba había sido la camarera del alojamiento y que había una partida de nacimiento de un niño nacido el 2 de noviembre de 1911 llamado Keith Neville McDonald. Con estos datos, Ward confirmó que el miembro de la orquesta del Titanic tenía una segunda familia en Jamaica.
Ward viajó a Jamaica para visitar los lugares en los que había estado su abuelo y descubrió que aún había personas con el apellido Hume, las cuales procedían de ese niño nacido en 1911, el cual decidió cambiarse el apellido a Hume.