Kenny Baker, el actor encargado de dar vida al entrañable R2-D2, ha fallecido a la edad de 81 años tras una larga enfermedad respiratoria. La noticia ha sido confirmada por su nieta, Abigail Shield, quien le ha recordado diciendo: "Él proporcionó muchísima felicidad a miles de personas, estamos celebrando el hecho de que era querido alrededor de todo el mundo. Estamos muy orgullosos de lo que ha conseguido a lo largo de su vida".
El actor británico se introdujo en el mundo de la interpretación a la edad de 16 años, pero no encontró la fama hasta su participación en La Guerra de las Galaxias. Aunque muchos de los fanáticos de esta saga no le recuerden por su nombre, nunca podrán olvidar su actuación en Una nueva esperanza (1977), El imperio contraataca (1980), El retorno del Jedi (1983), La amenaza fantasma (1999), El ataque de los clones (2002) y La venganza de los Sith (2005). Además, Baker también formó parte de El despertar de la Fuerza, película en la que trabajó como consultor para los movimientos robóticos.
Sus compañeros en esta mítica saga han querido rendirle un homenaje a través de las redes sociales. George Lucas se ha referido al actor como "un caballero de verdad, así como un gran soldado que trabajó duro pese a las difíciles circunstancias. Un hombre con talento que siempre hacia reír a todo el mundo, Kenny fue el corazón y el alma de R2-D2 y siempre será recordado por sus seguidores y por todo el mundo que le conocía".
Por su parte, Mark Hamill ha compartido una serie de fotografías que expresan cómo era el actor y le ha despedido diciendo: "Un amigo para toda la vida, me encanta su optimismo y su determinación. ¡Él era el droide que estaba buscando!".
Su carrera en el mundo del cine no solo se reduce a esta mítica saga, el actor también ha participado en otros títulos como Los Goonies, Dentro del Laberinto, Los héroes del tiempo y El Hombre Elefante, entre otras.