Silvanus Kettleburn
En la Comunidad Mágica hay grandes y heroicos magos y brujas, pero también otros más pequeños. Es el caso de Silvanus Kettleburn, el Profesor de Cuidado de las Criaturas Mágicas hasta que Rubeus Hagrid se hizo con el puesto.
Kettleburn era un hombre en continuo contacto con peligrosas criaturas y terminó su carrera con un solo brazo y media pierna. Por su jubilación, Albus Dumbledore le regaló un juego completo de extremidades de madera encantadas. Objetos que había que reponer cada cierto tiempo porque seguía corriendo peligrosas aventuras.
Precisamente por culpa de sus achaques, Kettleburn no pudo pelear en la Batalla de Hogwarts. No obstante, trepó hasta su ático en Hogsmeade para tirar todos sus gusarajos por la claraboya cuando pasasen los mortífagos.