Rogue One: Una historia de Star Wars no solo representa el episodio que se situaría entre La venganza de los Sith y Una nueva esperanza. Esta cinta también ha servido para que los fanáticos de La Guerra de las Galaxias se reencuentren con míticos personajes de la saga. La aparición de Darth Vader en el primer 'spin-off' era uno de los mayores alicientes de la película y su director, Gareth Edwards, ha admitido que siempre ha estado celoso de la importancia del Lord Sith en la trilogía original.
Esta es una de las principales razones por las que Vader tiene tanto protagonismo en la película. Edwards ha explicado que quería que su película tuviera uno de esos momentos en los que los espectadores se sorprenden al ver al Sith sin su armadura negra. "Estoy celoso de algunos momentos como el de El imperio contraataca en el que ves la parte trasera de su cabeza y piensas: '¡Oh, dios mío! Eso es genial', quería intentar algo así en nuestra película", confiesa en una entrevista con Empire. "Él es realmente víctima de varias quemaduras, por lo que no se divierte cuando no viste su traje, se siente incómodo".
Me encanta la idea de mostrar que también es vulnerable. Vader es muy, muy malo, así que intentas echar un pequeño vistazo al momento en el que muestra alguna humanidad. Un momento que te haga empatizar con él. El ver esas cicatrices y darte cuenta de que es un amputado... Simplemente el recordarte que él hizo todas esas cosas antes, hace que dudes, supongo".
Por sus palabras, parece que el director de Godzilla es un gran fan del personaje, por lo que no podía dejar pasar la oportunidad de incluir la escena en la que aparece en su tanque. Hace dos días, el co-productor de diseño Doug Chiang explicó que ese momento muestra "una pequeña historia de su pasado, como que, quizá, este lugar tenía un significado especial para él y allí es a donde va a curarse y a meditar". ¿Qué te parece el regreso de Darth Vader a la gran pantalla? Echa un vistazo al tráiler de Rogue One sobre estas líneas.
