"No a la guerra"
La gala del 2003 es la más recordada de todas porque practicamente todos los ganadores dedicaron su discurso a protestar contra la guerra de Irak. Javier Bardem, uno de los muchos que protestó contra la decisión de Aznar, declaró: "Ganar las elecciones no es un cheque en blanco. Hay que escuchar al pueblo". Del mismo modo, la presidenta de la Academia en aquél momento, Marisa Paredes, sentenció: "Esta no es una noche tensa, sino libre".
Un mal tropezón
Pocas cosas pueden acabar con la ilusión de los ganadores cuando suben al escenario a recoger la estatuilla, pero que se rompa el galardón es una de ellas. Esto es lo que le pasó al equipo de efectos especiales de Mortadelo y Filemón: misión salvar la Tierra. Javier Gutiérrez se tropezó cuando iba a entregárselo, con tal mala suerte que El Cabezón cayó al suelo y se partió en dos. Rápidamente, los organizadores trajeron otro y la cosa quedó en una anécdota.