Además de ser un éxito de crítica y taquilla – más de 270 millones de dólares recaudados en todo el mundo (alrededor de 254 millones de euros)- de La La Land se pueden extraer algunas lecciones de vida muy importantes. Según informa The Huffington Post, ¡Estas cuestiones están incluso avaladas por la ciencia!
A continuación te explicamos estas tres revelaciones pero ATENTO, la última contiene un spoiler de la película. Evítala si todavía no la has visto.
La perseverancia
Si algo define a los personajes protagonistas interpretados por Ryan Gosling y Emma Stone es la constancia con la que intentan alcanzar sus sueños. Mia no deja de aspirar a conseguir su trabajo ideal como actriz presentándose a diversas audiciones, mientras que Sebastian no ceja en su empeño de abrir su propio local de Jazz.
Tras un estudio realizado a 400 estudiantes americanos por investigadores israelíes de la Universidad de Tel Aviv, se ha llegado a la conclusión de que las personas que tienen más perseverancia a la hora de perseguir sus sueños alcanzan su meta antes que los que no lo son, ya que tienden a correr más riegos para conseguirlo.
El apoyo de tu pareja
Aunque cada uno tienen un sueño diferente, Mia y Sebastian se apoyan mutuamente para alcanzarlos. Pero tampoco hace falta que compartas absolutamente todo con tu pareja, ya que, por ejemplo, a Mia no le gusta el Jazz y Sebastian lo adora.
La Universidad de Iowa estuvo investigando sobre este tema haciendo un seguimiento a 103 parejas heterosexuales durante un periodo de cinco años. El resultado demostró que respaldar lo suficiente a tu pareja no consolida una relación, sino que es más importante tener una buena comunicación y ser sinceros el uno con el otro.
spoiler:
No siempre hay que acabar con el amor de tu vida
Aunque La La Land sea principalmente una historia de amor, el final puede resultar un poco agridulce para todos aquellos que esperaban que la pareja terminara unida. Pero Mia y Sebastian consiguen alcanzar sus sueños profesionales y tienen que aprender a ser felices con los que les ha tocado vivir.
Una conocida psicoterapeuta estadounidense, Abby Rodman, afirma que el mensaje con el que hay que quedarse de esta película es que hay que ser sincero con uno mismo y perseguir siempre los sueños. No siempre se consigue todo lo que se quiere, pero hay que aceptarlo e intentar ser lo más feliz que se pueda.
