Este año la Star Wars Celebration se ha celebrado con un sabor agridulce. Puede que Carrie Fisher falleciese el pasado mes de diciembre, pero su figura sigue muy viva entre los seguidores de la saga y, especialmente, en los diferentes paneles que se han celebrado durante estos cuatro días. Fisher ha estado presente en el 40 aniversario de la franquicia, en el panel de Los últimos Jedi y, cómo no, en el tributo dirigido por Mark Hamill, su hermano en la ficción.
Durante el primer panel del evento, el de las cuatro décadas de Una nueva esperanza, George Lucas y Kathleen Kennedy dedicaron unas bonitas palabras a la eterna princesa Leia: "No sólo va a ser recordada para siempre por esos afortunados que la conocieron, también será recordada por aquellos que no son lo bastante mayores aún para decir "Que la fuerza te acompañe". Inmediatamente después, su hija, Billie Lourd, salió al escenario con un vestido inspirado en el estilo de Leia para honrar su memoria:
Mi madre solía decir que no sabía dónde acababa la Princesa Leia y empezaba Carrie Fisher. Era imperfecta en muchos sentidos, pero sus imperfecciones y su voluntad por hablar de ellos era lo que la hacían perfecta.
Leia es un personaje con mucho poder en la nueva franquicia y los participantes del panel de Los últimos Jedi también dedicaron un momento a hablar de ella. Kathleen Kennedy resaltó el trabajo de Fisher en esta entrega: "La actuación que terminó dando, creo que vais a encontrar en ello un tributo enorme a su talento".
Por su parte, Rian Johnson, director del Episodio VIII, habló de su experiencia trabajando con ella al mismo tiempo que se proyectaban emotivas imágenes del rodaje: "La adoro. Y conecté con ella de inmediato como escritora. Tenía una mente brillante y me sentaba en su cama durante horas, hablando del guion, y hacíamos sesiones de improvisación. Al final había un diálogo de cuatro líneas que salió de eso".
No podemos olvidar el sincero tributo de Mark Hamill. El actor que intrepreta a su hermano en la ficción -y en cierta manera también en la vida real, tal y como declaró él mismo- dedicó un panel a recordar su memoria y, aunque relató anécdotas con mucho humor durante la mayor parte del tiempo, no pudo contener las lágrimas cuando leyó el texto que le dedicó tras la noticia de su muerte: "Nunca es fácil perder a un miembro tan vital e irremplazable de la familia, pero esto es francamente desgarrador. Carrie era única en su especie y nos pertenecía, le gustase o no. Era nuestra princesa, maldita sea".