La muestra indiscutible de que una película se ha convertido en una de culto es cuando los espectadores se afanan en hacerse con los objetos que se ven en ella. Está el anillo de El señor de los anillos, el latigo de Indiana Jones o las varitas (y las decenas de piezas de 'merchandising' más) de Harry Potter. Pues la sudadera naranja de Kate Winslet en Olvídate de mí tiene el honor de encontrarse en esta lista.
Aunque Melissa Toth hizo una gran labor con el vestuario de la película, esto no es mérito suyo, ya que es la única referencia al vestuario que tenía el guion de Charlie Kaufman: "Esas veces que algo está especificado en el guion, cuando se trata de algo contemporáneo, puede tener un millón de variaciones diferentes. Lo único que escribió era que tenía que ser una sudadera naranja que pegase con su nuevo color de pelo. Pero la cuestión era '¿Qué tipo de sudadera naranja?'.
La que escogimos para Clem era muy gruesa. Casi como una sudadera industrial o de seguridad, como lo que llevaría un trabajador de la construcción. Casi se mantiene por sí misma. Tiene su propia vida. Realmente coge mucho espacio del plano
Afortunadamente, la sudadera no solo llamaba la atención al espectador, sino que cumplía con su función de abrigar a Winslet. Cuando grabaron la escena de la playa, era pleno invierno y las temperaturas descendieron. "Menos mal que la sudadera tenía 17 capas porque tenía que mantener caliente a esta pobre mujer", explica Toth.