Un año después del estreno de 7 años de Roger Gual, la primera película española original de Netflix, la prestigiosa plataforma de visionado en 'streaming' lanza su segunda cinta de producción propia: Fe de etarras, un filme dirigido por Borja Cobeaga (Pagafantas, No controles, Negociador) y con un elenco encabezado por Gorka Otxoa, Javier Cámara, Miren Ibarguren y Julián López. Al igual que en sus anteriores películas, el también autor del libreto de Ocho apellidos vascos, vuelve a trabajar mano a mano con su eterno compañero Diego San José (Que vida más triste) como guionista.

Descrita como una "insólita comedia de humor negro", Fe de etarras nos trasladará hasta el inolvidable verano de 2010 y nos presentará a un peculiar comando de la banda terrorista ETA que se ha atrincherado en un piso franco a la espera de una llamada.

La película estará disponible en la plataforma a nivel mundial el próximo 12 de octubre, aunque se estrenará en la 65 edición del Festival Internacional de Cine de San Sebastián que se celebra del 22 al 30 de septiembre.

SensaCine tuvo la oportunidad de asistir al rodaje de Fe de etarras en Madrid. A continuación te contamos todo lo que aprendimos de la película en la divertida jornada.

1. Una idea que lleva gestándose 14 años en la mente de sus creadores

Fe de etarras se estrena en 2017, mismo año en el que se ha llevado a cabo el rodaje, pero la idea lleva gestándose en las mentes de sus creadores desde hace más de una década. Así lo explicaban Borja Cobeaga y Diego San José en su encuentro con la prensa, donde contaron que, en la idea original, uno de los miembros del comando se acababa convirtiendo en el presidente de la Comunidad de Propietarios.

Para mí es como 'Vaya semanita: la película'.- Gorka Otxoa.

Netflix

"Diego [San José] y yo, desde que acabamos de hacer 'Vaya semanita' en el año 2004 o así, teníamos la idea de hacer una película que se llamase 'Fe de etarras'. Al principio era una película de episodios, que eran casi como 'sketches', y que luego fue evolucionando hacia las vivencias de un comando en un piso franco", cuenta Cobeaga. "Desde 2003, que es cuando surge la idea, hasta 2017, que es cuando se está haciendo, han pasado muchas cosas políticamente", añade San José. "La película se ha ido adaptando y la idea ha madurado mucho en estos 14 años".

Está muy ubicado en 2010, que es cuando transcurre la acción, pero visto desde la perspectiva de 2017, que sabes lo que ha pasado antes. Que en 2011 se declararía el alto el fuego. Es decir, que aunque esté situado en un tiempo pasado, la perspectiva es muy actual.- Borja Cobeaga