Jennifer Lawrence no tiene problemas para admitir que no le gusta una de las películas mejor valoradas del año como es El hilo invisible, que le dolió mucho no haber podido interpretar a la protagonista de Alicia en el país de las maravillas o que, efectivamente, se lava las manos después de ir al baño. Por eso, si se emborracha sin querer antes de la premiere de su último filme, lo dice y punto.
A finales de febrero tuvo lugar el estreno de Gorrión Rojo en Estados Unidos y, antes de acudir al cine, la actriz grabó un programa de Watch What Happens Live! donde parece que hubo alcohol y Lawrence no se cortó a la hora de beber.
Así lo ha admitido en una nueva entrevista para Andy Cohen, presentador de dicho programa: "Me emborraché en tu programa. ¿Podemos ver las fotos de la premiere, por favor? Parece que he pasado por una terapia de electroshock. En mi cabeza pienso 'Soy un sueño gótico' y, luego, veo las fotos y pienso 'Soy un sueño gótico puesto de crack'. Mis ojos son como '¡No estoy borracha!".
Una colaboradora de Buzzfeed acudió a este evento y escribió un reportaje asegurando que no se dio cuenta del estado de Lawrence.