Las chicas de H2O sufrieron juntas la mayor transformación de sus vidas, convertirse en sirenas. Teniéndose siempre como apoyo, las tres fueron capaces de ocultarle su secreto al mundo, así como de controlar sus poderes y resistirse a la influencia de la luna llena. Aunque todas pasaron por una o varias relaciones amorosas, nada hubo más importante que su amistad. De todas las aventuras que les ofrece la vida, la mayor es la de poder disfrutar de su don las tres juntas, convirtiéndose en un equipo casi imparable.
Thelma y Louise o Lizzie y Miranda son algunos de los mejores ejemplos de hermandad entre chicas.