Tras sufrir distintas modificaciones a lo largo de los últimos meses, X-Men: Dark Phoenix y Los Nuevos Mutantes han vuelto a retrasar su estreno y finalmente no llegarán a las salas de cine hasta 2019. Esta noticia ha sorprendido a muchos fans, que se pregunta a qué se debe esta decisión. ¿Es una buena o una mala señal?
Según explica Collider, fuentes suyas han revelado que la continuación de X-Men: Apocalipsis realizó un pase de prueba, en el que descubrieron qué elementos no funcionaban. Aunque este es un proceso habitual en la industria, rodar las escenas extras necesarias se complica en el caso de este filme debido a la apretada agenda de sus protagonistas, ya que la película tiene un reparto formado por grandes estrellas. De esta forma, resultaba imposible grabar estos reshoots ates de agosto, y después son necesarios unos meses para editar los efectos especiales.
De esta forma, su llegada el 14 de febrero de 2019 permitiría que fuese estrenada sin necesidad de meter prisa en la producción. Aunque desde la web también tranquilizan a los seguidores de los mutantes, pues aseguran que el sólido de guion de Simon Kinberg fue lo que convenció a Jennifer Lawrence y Michael Fassbender para regresar a la franquicia.
En cuanto a Los Nuevos Mutantes, ya se había anunciado que Fox la retrasó en un primer momento para rodar escenas nuevas que hicieran la película más aterradora y que permitiesen incluir un personaje nuevo. Acorde con lo publicado con Collider, esto sigue siendo cierto, aunque el estudio ha insistido en que tonalmente sea muy diferente, de la misma manera que lo fueron Logan o Deadpool. Por eso, aunque los pases de prueba funcionaron, son necesarios cambios.
Lo más interesante es que podrían tener que volver a rodar hasta el 50% de la película. También es posible que ahora decidan incluir uno o dos personajes nuevos que tengan peso a lo largo de todo el filme y no se limiten únicamente a un cameo. Por último, se rumorea que el director Josh Boone ha tenido diferencias creativas con el estudio, por lo que el cambio de fecha hasta el 19 de agosto del próximo año podría deberse parcialmente a esta cuestión.
De momento habrá que conformarse con disfrutar del regreso del irreverente Mercenario Bocazas interpretado por Ryan Reynolds, que vuelve a los cines a partir del próximo 18 de mayo en Deadpool 2, cuyo tráiler puedes ver sobre estas líneas.