Proyecto Rampage podría convertirse en la película que rompa la maldición de las adaptaciones de videojuegos. Está basada en un juego de los años 80 de mismo nombre y, al contrario de lo que ha ocurrido con filmes como Tomb Raider o Assassin's Creed, lo bueno es que no tiene muchas historias que el guion deba respetar o una mitología que seguir.
"Para mí, es la primera película que hago basada en un videojuego. Elegí Rampage porque era de los 80 y, básicamente, eran tres monstruos que van destruyendo edificios. No hay reglas, no hay personajes, no hay mitología... Nos daba la oportunidad de crear, no teníamos que estar limitados. Lamentablemente, es lo que ocurre con muchas películas de videojuegos, que tienen mucha historia y mitología a la que limitarse, por eso han sido un reto. Queremos que la gente se enamore de Davis Okoye (Dwayne Johnson), del gorila y la relación entre ambos".