La posible secuela
Este bajón, forzosamente, tiene que haber supuesto un cambio sustancial en los cálculos de Disney, y es probable que la manifestación más clara de esta vaya a ser que cualquier plan de secuela quede automáticamente abortado. Algo que no habría tenido por qué afectar al anterior 'spin-off', pero que sí que depara ciertas consecuencias para Han Solo... y aquí hemos de meternos en SPOILERS.
Prácticamente la totalidad de la película de Ron Howard está concebida como la primera de una posible saga protagonizada por el contrabandista. Tras su desenlace, aún faltan varios años para los sucesos de Una nueva esperanza y nos quedamos con las ganas de ver cómo Han y Chewie comienzan a trabajar para Jabba El Hutt. Por si fuera poco, la trama de Qi'ra y Darth Maul está totalmente abierta. No obstante, es muy posible que tal secuela no llegue a materializarse por culpa de la taquilla, o, al menos, no llegue a materializarse un Han Solo 2. Todos queremos seguir viendo a Donald Glover como Lando Calrissian, y si además en ese hipotético 'spin-off' nos demuestran que lo de la pansexualidad era verdad, mejor que mejor.
Pero... ¿y Marvel?
Sin duda, por encima de la competencia o los problemas de producción, la principal causa de la decepcionante taquilla de Han Solo ha sido el escaso tiempo que ha pasado entre el estreno de Los últimos Jedi y éste. Han sido apenas cinco meses frente a los doce a los que nos había acostumbrado Disney, y los tres años que Lucas dejaba pasar entre las precuelas y las partes de la trilogía original. Todo apunta, entonces, a que el público está un poco saturado de Star Wars.
Pero, ¿por qué el Universo Cinematográfico de Marvel puede permitirse varias películas al año sin que las finanzas fallen, y la saga galáctica no? La respuesta es, simplemente, que el formato Marvel es muy distinto al de Star Wars. Para empezar, el primero proviene de los cómics, donde la narrativa fragmentada es una constante y los fans ya saben a lo que van, además del hecho de que la historia puede seguirse de forma lineal y los personajes son casi siempre los mismos. Compara esto con Star Wars, donde hemos tenido dos películas que siguen el mismo argumento, sí, pero intercaladas con una precuela de las que vendrían a ser sus precuelas, y otra precuela de la precuela de éstas que serían sus precuelas. O algo así.