Amy Schumer vuelve a romper los estereotipos femeninos con su nueva película, ¡Qué guapa soy! En el filme interpreta a Renee Bennett, una chica que odia su cuerpo y por ello tiene la autoestima por los suelos. En una clase de 'spinning' se da un golpe en la cabeza que provoca que se vea como una auténtica supermodelo. Gracias a ello, comienza a actuar con confianza y consigue casi todo lo que se propone.
Su transformación psicológica es cosa de fantasía, pero el filme muestra algunas situaciones por las que cualquier chica ha pasado en algún momento en su vida. Seguro que tú también te sientes identificada con al menos una de estas cosas:
Los dichosos tutoriales de Youtube
¿Quién no ha visto algún tutorial en YouTube sobre cómo hacerse un peinado imposible? Aunque parezca sencillo, todas sabemos que no lo es. El personaje de Amy Schumer protagoniza una de las escenas más divertidas de la película tratando de hacer algo parecido. Cuando la realidad supera las expectativas todas las ganas y motivaciones que nos hacían querer lucir un peinado extravagante se esfuman, pero nos hace reirnos de nosotras mismas.
Nos centramos en pequeños detalles negativos y los agrandamos al máximo
La protagonista de la historia es incapaz de ver su lado positivo y, en su lugar, solo se fija en sus defectos, la mayoría de ellos físicos. En una de las primeras citas que tiene con Ethan (Rory Scovel) este comienza a hablar del tema y le cuenta que lo que le gusta de ella es que pasa de esos pequeños detalles negativos a los que solemos dar demasiada importancia. Lo hace Renee y cualquier persona que habite sobre la faz de la Tierra de manera inconsciente.
Los complejos de las 'guapas'
Todas tenemos complejos y ¡Qué guapa soy! lo sabe plasmar en muchos momentos del filme. Durante una escena en el gimnasio donde Renee practica 'spinning' conocerá a Mallory, a quien da vida la modelo Emily Ratajkowski. Este personaje comparte con la protagonista una escena en la que le cuenta que le ha dejado su novio, algo impensable para Renee, debido al físico y la belleza de la joven. Será entonces cuando entienda que hasta las más 'guapas' pueden tener la autoestima por los suelos.
Reirse de chicos que tienen aficiones "de mujeres"
Un detalle importante del filme es que tiene en cuenta que los hombres también son sometidos a cierta presión social y se ven obligados a cumplir con las expectativas de su género. Ethan es un hombre con aficiones que, socialmente, están asociadas a las mujeres, como es la zumba, y le da miedo reconocerlo en público por el qué dirán. En una escena, reconoce que quiere ser operador de cámara pero él no es "un hombre" porque no lleva tatuajes ni conduce camiones.
Nos olvidamos de que lo que importa es la actitud
Cuando Renee se siente más guapa e irresistible coincide cuando más optimista, alegre y extrovertida es, algo que cautivó a muchos de los personajes de la película. Y es que sentirse bien con una misma hace que todo lo demás fluya de manera natural. Antes de pensar que no era guapa, Renee tenía miedo a presentar su currículum para ocupar el puesto de secretaria en Lily LeClaire, pero cuando recibe el golpe en la cabeza y la hace cambiar su percepción consigue ese trabajo contra todo pronóstico. Todo tiene que ver con el estado de ánimo.