Climax, la cinta dirigida por el cineasta argentino Gaspar Noé (Love), consiguió llevarse el premio a Mejor Película durante la 51ª edición del Festival de Cine Fantástico de Sitges. La película, ambientada en plenos años 90, sigue la vida de un grupo de bailarines tras finalizar uno de sus ensayos de danza. Lo que comenzó como un simple festejo derivará en una rave de excesos, alcohol, sexo y drogas.
Además de contar con bailarines profesionales para realizar el largometraje, Noé quiso contar con la actriz, modelo y bailarina Sofia Boutella (Atómica). Según aseguraba l estrella de la momia a Deadline, lo que más le cautivó de este misterioso proyecto fue su director. “Tengo mucho respeto por Gaspar. Es un verdadero artista, tiene una visión y va por ella".
Noé contactó con ella a través de Instagram y lo siguiente que recuerda la actriz es estar en París charlando sobre la película y su guión, del que poco se sabía de momento. “Me dijo que quería una película sobre bailarines a los que se había inyectado LSD, viendo lo que pasaba. Eso es todo lo que tenía, sólo un tratamiento de cinco páginas". Boutella ha descrito la forma de trabajar del cineasta como "muy inusual”, ya que no utilizaba ni la estructura ni las técnicas a las que estaba acostumbrada a trabajar en Hollywood.
Salvo conocer que daría vida a la coreógrafo de la película, la actriz desconocía el resultado final de la película. “Ensayábamos unas cuatro o cinco horas al día, haciendo escenas de ocho a diez minutos, y luego rodábamos entre 14 y 17 tomas después de los ensayos. Fue un proceso bastante interesante: recuerdo haberlo visto por primera vez en Cannes sin saber en absoluto lo que iba a encontrar”. Desde luego, Climax ha sido toda una sopresa para la intérprete tras la acogida por la crítica de la cinta. Sobre estas líneas no te pierdas el tráiler.
