Cuando Javier Fesser comenzó a trabajar en Campeones, posiblemente no imaginase el fenómeno en el que se iba a convertir su proyecto. La película, que contaba con un presupuesto de 4,5 millones de euros, lleva recaudado casi cinco veces lo que costó, congregando a 3 millones de espectadores en las salas. La historia, sin embargo, no acaba aquí.
Los actores que se pusieron en la piel de los personajes del filme tienen muchas historias que contar. El camino que recorrieron, desde su elección para participar en la película hasta el preestreno de la misma, se conoce ahora gracias a Ni distintos ni diferentes: Campeones. Este documental, dirigido por Álvaro Longoria, nos cuenta la historia que hay tras cada actor, sus anécdotas y, sobre todo, su lucha para salir adelante.
El equipo ha presentado el proyecto el pasado lunes en el Hotel Hesperio, evento en el que un tema destacó por encima del resto: la posibilidad de que Campeones sea uno de los largometrajes escogidos para competir por el Oscar a la Mejor película de habla no inglesa.
La ilusión se muestra, de forma clara, en la cara de los actores al hablar de este tema, aunque cada uno tiene sus propios motivos para querer que este sueño sea una realidad. Jesús Lago, Jesús en la cinta, afirma que tiene muchas ganas de acudir a la gala “para ver a todos los famosos” mientras que Stefan López, quien da vida a Manuel, asegura que desea viajar a Estados Unidos “para ver un tornado”. Aún así, este último no se muestra del todo confiado: “Estoy preocupado porque hay un señor, el presidente Donald Trump, que no me va a dejar entrar por mi color de piel”. Longoria trata de convencer al actor de que no es negro. Este sentencia: “A mí en el colegio me llamaban así”. José de Luna, encargado de meterse en la piel de Juanma, lo tiene claro:
Esta película ha sido una experiencia muy buena para nosotros. Hablamos sobre la familia, los amigos y sobre cómo se ven las personas con discapacidad. Es una película especial para nosotros para que sepan cómo trabajamos y cómo somos, para que se vea que somos personas normales
Lo cierto es que el largometraje promete. En México, se consiguió convocar a 5.000 personas para una sesión inolvidable, mientras que en Los Ángeles, la película está creando las mismas sensaciones que en nuestro país. El director de otros proyectos como Dos Cataluñas cuenta, con una sonrisa cómplice:
Javier Fesser está enseñando la peli a los académicos y es emocionante cómo la están percibiendo. Es verdad que son valores universales, pero es magnífico ver cómo se ríen, lloran y se enternecen por las mismas cosas. Se han enamorado de estos individuos
El camino hasta la gala de los Oscar del 24 de febrero es muy largo. El reparto prefiere centrarse en lo que han conseguido con la película, un filme donde el trabajo que realizaron fue impresionante. “Ha sido un lujo trabajar con ellos. La mayoría de actores son indisciplinados, pero ellos han hecho que rodar sea algo fácil”, afirmaba la productora de Campeones, Lucrecia Botín.
Esto es sorprendente, sobre todo cuando, a veces, las cosas no han sido del todo fáciles. Longoria recuerda una anécdota del rodaje con José de Luna y el actor protagonista Javier Gutiérrez, sin evitar sonreír:
Estuvimos cinco horas filmando la escena de la ducha, por lo que se acabó el agua del termo. Javier Gutiérrez se asomó y el agua le salpicó. Este no podía creer como José podía aguantar la temperatura sin quejarse ni una sola vez
Esta ilusión y esta entrega ha conseguido calar a todos los espectadores, incluso a los más jóvenes: “Hay niños de 11 años hablando de los Campeones como si fueran los Vengadores. Nos hace mucha ilusión. Los niños están aprendiendo a respetar al diferente, sin importar cual sea su peculiaridad”, explica Longoria.
¿'Campeones 2'?
La película ha conseguido el objetivo, sin duda. Parece inevitable, entonces, que se hable de una segunda parte: “Lo estamos meditando. Lo que es seguro es que se va a hacer una versión en inglés, que será un bombazo. Pero sí, creo que hay más historias que contar”, cuenta, a su pesar, el director. El bombazo, sin embargo, pudo ser la intervención posterior de José de Luna: “Quizá hagamos una serie”. Ante la posibilidad de que sean otros actores los protagonistas de la misma, este no duda: “Yo quiero aparecer, la verdad”.
Es indudable que esta película ha cambiado la vida de unas personas que, como señala Longoria, “han pasado a ser miradas de forma diferente, a ser parados en el aeropuerto para que la gente se tome fotos con ellos”. Los Campeones, de hecho, parecen tener mucho que decir aún:
Gloria Ramos, quien interpreta a Collantes en la película, ha hecho una aparición en el programa Bailando con las estrellas, algo que ha entusiasmado a una joven que sigue luchando por conseguir que su sueño de convertirse en actriz se haga realidad. Gloria ha comenzado ya sus clases de interpretación tras librarse además de, como se puede ver en el documental, uno de sus demonios: la natación. “La natación me tiene… aquí tienes a mi señora madre, que me tiene obligadísima. Menos mal que ya no tengo que ir. Prefiero hacer judo, por ejemplo, o tiro con arco”
La visión de Gloria no es la única. Roberto Sánchez, ganador de 353 medallas y 20 copas en baloncesto y atletismo, parece tener decidido dejar el deporte profesional atrás. “La vida de un deportista es difícil. Yo ya me hago mayor y voy perdiendo la magia en la cancha. Creo que, en cuanto a mi vida se refiere, voy a inclinarme por el mundo del espectáculo”.
El tiempo dirá si estos luchadores consiguen su objetivo. Por el momento podremos verlos, una vez más, en Ni distintos, ni diferentes: Campeones, que se estrena el 16 de noviembre en cines, un documental con un título muy especial, que, según Longoria, busca tener la misma naturalidad que sus personajes: "Lo que más me gusta es que, yendo con ellos, la gente comienza a referirse a la gente con discapacidad como Campeones, algo que no pensábamos que llegaría a convertirse en el léxico de la gente. Me gusta Campeones".