Una de las mejores características de la relación entre Jackson y Ally en Ha nacido una estrella es la manera en la que él halaga los complejos de su pareja. Desde el comienzo de la película, el personaje de Lady Gaga le dice que se siente muy insegura con su nariz, ya que todo el mundo le había dicho que "era demasiado grande" y que no lo conseguiría.
Es un dialogo inspirado en la vida real de la cantante. Como declaró, según recoge VanityFair, más de una persona le dijo cuando estaba empezando que "debería hacerme un arreglo en la nariz", a lo que añadió en una entrevista con Los Angeles Times que "cuando mi personaje habla de lo fea que se siente, es real. Soy muy insegura. Me gusta predicar, pero no siempre predico lo que digo".
No es el único detalle que se ha sacado de la experiencia de la artista. El hecho de que Jackson la conozca en el bar de drag queens viene directamente de cuando Gaga actuaba en bares drags en el Lower East Side de Manhattan y también es una referencia a la comunidad LGBT que siempre la ha apoyado: "De vez en cuando bromeo al decir que, detrás de cada icono femenino hay un hombre gay. Realmente no estaría aquí sin la comunidad gay, que me han enseñado mucho sobre el amor, la aceptación y la valentía".
La escena que viene justo detrás, cuando Jackson visita a la cantante en el vestuario, fue improvisada por Willam Belli y D.J. “Shangela” Pierc, conocidos drag queen y dos 'performers' del bar. Bradley Cooper les pidió que hiciesen lo que les saliese más natural, ya que "vosotros sabéis mejor que yo lo que ocurre en un vestuario de un bar drag, haced lo que sabéis".
