Dar vida a Freddie Mercury en la gran pantalla no es tarea fácil. Además de aprender sus movimientos más característicos y la forma en la que actúaba encima del escenario, Rami Malek tuvo que entrenarse para cambiar el estado de su cuerpo. El actor, que da vida al líder de Queen en el 'biopic' Bohemian Rhapsody, ha revelado qué hizo para conseguir una energía física que le permitiese llevar a cabo los mismos espectáculos que Mercury.
"Realmente no quería ganar músculo. Solo quería que mi cuerpo llegase a un punto en el que pudiese hacer un concierto de 22 minutos una y otra vez durante cinco días sin quedarme sin aliento", explica. "Bueno. Es bastante imposible hacer eso. Había días en los que me encontraba tumbado intentando absorber todo el aire que podía", añade.
El entrenamiento de Malek, además, tuvo que adaptarse a los momentos de la vida de Freddie Mercury a medida que los rodaba. "Tuve una dieta específica. Me musculé la primera semana e, inmediatamente, tuve que perder músculo y peso e interpretar al joven Freddie, que es bastante flacucho. Tenía que ser bastante consciente de cuándo entrenar y cuando ponerme a dieta. No se lo recomiendo a nadie", concluye.
Bohemian Rhapsody es uno de los éxitos de este año. La película, dirigida por Bryan Singer y Dexter Fletcher, lleva recaudados más de 635 millones de dólares en todo el mundo. El filme, además, ha sido nominado a los Globos de Oro en la categoría de drama a Mejor actor para Malek y Mejor película. ¿Estará también entre los candidatos a hacerse con algún Oscar?
Fuente: The Wrap.