Día de luto en el cine de autor europeo. El actor suizo Bruno Ganz ha fallecido hoy en Zúrich a los 77 años de edad a causa de un cáncer que padecía, tal y como informan varias agencias de comunicación. El actor, a quien recientemente hemos visto en La casa de Jack, la última película del controvertido Lars von Trier, fue uno de los grandes actores del cine europeo de las últimas décadas y rostro fetiche para cineastas como Wim Wenders, Theo Angelopoulos o el propio Von Trier.
Nacido el 22 de marzo de 1941, Ganz ha trabajado en el cine, la televisión y en el teatro, aunque es especialmente conocido por su descarnada interpretación de un Adolf Hitler en sus últimos días en el búnker de Berlín en la película alemana El hundimiento (2004), de Oliver Hirschbiegel. Antes de ello, no obstante, se convirtió en icono para la cinefilia gracias a sus papeles en las cintas de Wenders El amigo americano, Tan lejos, tan cerca o Cielo sobre Berlín, en la que encarna a un ángel que se enamora de una joven trapecista en la Alemania de la posguerra.
Ganz también ha estado a las órdenes de maestros como Theo Angelopoulos, Stephen Daldry, Jonathan Demme, Sally Potter o Ridley Scott en películas como La eternidad y un día, The Reader, El mensajero del miedo, The Party o El consejero.
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