El viaje a la Luna de 1969 como nunca se ha visto antes. Así es el documental Apollo 11, de Todd Douglas Miller, que llega hoy 16 de julio a las salas españolas, en plena celebración por el 50 aniversario del primer alunizaje del hombre. Presentada en Sundance 2019 –donde se llevó el premio al mejor montaje– Apollo 11 se estrena, eso sí, por tiempo limitado –hasta el 20 de julio– y en unos cuantos cines seleccionados de nuestra geografía.
Sin duda, se trata de una oportunidad única para disfrutar de uno de los documentales del año en un momento irrepetible. Porque Apollo 11 reconstruye la misión que llevó a Neil Amstrong a poner el pie en la Luna y lo hace utilizando material de archivo proveniente del servicio documental de la NASA y de otros archivos nacionales de Estados Unidos para ofrecer un relato espectacular: imágenes inéditas de los astronautas, del centro de control en Cabo Cañaveral, acompañadas de audios que jamás han salido a la luz. Hasta ahora. Una superproducción a la altura de la misión que se retrata con la que Miller trata de cerrar la controversia sobre el "gran paso para la humanidad" que supuso esa aventura. Hablamos vía telefónica con el cineasta para que nos responda esa y otras preguntas.
¿Cuál es el origen de 'Apollo 11'?
Todd Douglas Miller– Habíamos rodado un corto sobre la última misión tripulada del Apolo 17 a la Luna, utilizando material de archivo. Ese fue nuestro primer contacto con la NASA. Nos dimos cuenta de que se acercaba el 50 aniversario de la llegada del hombre a la Luna y de que hacía tiempo que no se había recuperado el material audiovisual de esa misión. Ahí nació la película.
¿Fue fácil el acceso a los archivos de la NASA?
Todd Douglas Miller– La verdad es que no fue demasiado fácil al principio, por una cuestión de burocracia. Los primeros pasos fueron cuantificar y clasificar metraje, fotos y audio de sus archivos. Había filmes en 16mm, en 35mm. Y también una colección de filmes en gran formato, en 70 mm, que apenas había sido utilizado. Estaba preservado a la perfección.
Esas imágenes en gran formato son espectaculares.
Todd Douglas Miller – Los detalles y la calidad de la imagen eran espectaculares. Pero aún y así, teníamos que digitalizar ese material y fue una de las procesos clave de la producción. Al principio, íbamos a digitalizar los filmes en 16mm y 35mm en 4K. Pero el 70mm era más delicado y hablamos con la empresa responsable del escaneado. Nos dijeron: si podéis esperar seis meses, tendréis las imágenes en 16K. Como montador, esperar seis meses era demasiado pero este tipo de oportunidades solo pasan una vez en al vida. El proceso de digitalizar las imágenes de distintos formatos fue al final mucho más laborioso, sobre todo para lograr cierta armonía.
¿Hasta qué punto tuviste libertad creativa para realizar 'Apollo 11'?
Todd Douglas Miller– Tenía muy claro desde el principio que esta era nuestra película. Obviamente, la NASA nos ofreció todo el apoyo posible, pero no hubo injerencias.
Eres también responsable del montaje del documental. ¿Cuál fue la estrategia para diseñar todo el arco narrativo de la película?
Todd Douglas Miller– Cuando pudimos acceder al material de gran formato y a los audios, enseguida nos dimos cuenta de que teníamos un material único y que ensamblarlo todo iba a ser una aventura apasionante. Pero, bueno, teníamos que seleccionar y reordenadar partiendo de unos 500 carretes de filme y ¡11 mil horas de audio! Por el contrario, disponíamos de tiempo. Se trataba de sentarse a revisar y escuchar todo.Teníamos claro que queríamos contar la historia de modo cronológico y empezamos ensamblando el material siguiendo la misión, que tiene una duración de nueve días. Fuimos incluyendo el material -grabaciones, fotos y audios- en la línea de tiempo de esos días y a partir de ahí, cuando comenzamos a entender lo más esencial de cada uno de los días, fuimos reduciendo el metraje.
Las espectaculares imágenes no le restan ni un ápice al diseño de sonido. ¿Cómo trabajásteis los audios que aparecen en el filme y los efectos sonoros?
Todd Douglas Miller– El diseño de sonido de Apollo 11 es obra de Eric Milano y su trabajo es de lo que más orgulloso estoy. Hubo que grabar, regrabar, limpiar, corregir y, en fin, estar mucho encima, para acabar logrando un sonido que fuera lo más exacto posible a lo que sucedió. Siempre con el material de archivo como punto de referencia. Aparte, está también el trabajo del compositor Matt Morton, que ha creado una banda sonora utilizando instrumentos y sonidos de la época, de 1969: sintetizadores Moog y otros aparatos electrónicos de entonces.
¿Crees que 'Apollo 11' da por concluida la polémica sobre el viaje a la Luna de 1969 y sobre si fue o no un montaje?
Todd Douglas Miller– Ese era uno de los objetivos que nos marcamos a la hora de plantear la película. Es lógico dudar, pero creo que las imágenes de Apollo 11 hablan por sí mismas y que esta película resuelve dudas y controversias sobre el viaje a la Luna.
¿No crees entonces en la teoría de que Stanley Kubrick dirigió el montaje de las imágenes del viaje a la Luna?
Todd Douglas Miller– ¡Me hubiera encantado verle en alguno de los filmes que revisamos! Pero siento decepcionaros: no aparece en ningún fotograma.
Por último, ¿qué legado ha dejado en la humanidad ese primer alunizaje de 1969?
Todd Douglas Miller– Fue una misión muy importante que nos recordó lo lejos que podemos ir si unimos fuerzas y talentos. Es un legado sobre el genio humano, sobre la idea de que podemos ser mejores si nos lo proponemos.