Maya Hawke ya es una de las actrices revelación de la actualidad. Su papel en la temporada 3 de Stranger Things, donde daba vida a Robin -uno de los mejores personajes de esta entrega-, le ha catapultado a la fama y todo apunta a que muy pronto estrenará muchos proyectos. Por el momento, podemos verla como parte del elenco de Érase una vez... en Hollywood, donde tiene un rol más bien anecdótico.
La actriz interpreta a 'Flower Child', es decir, una de las chicas que acompañaba a Charles Manson. Cuando los cuatro miembros de la Familia Manson deciden asaltar la casa de Rick Dalton, el personaje de Hawke es la que advierte que se ha dejado el cuchillo en el coche y, en lugar de recuperarlo, huye del lugar de los hechos.
Casualmente, Maya Hawke es hija de Uma Thurman, musa por excelencia de Quentin Tarantino y ex-pareja del cineasta, por lo que trabajar en esta cinta debe haber sido algo bastante familiar para ella. Trabajar con el cineasta, además de ser un gran paso adelante, ha sido una experiencia maravillosa, según las palabras de la propia Hawke.
"Lo mejor de Quentin es que ama el cine. Ama el cine con una pasión más intensa que nadie que puedas conocer. Cuando estás en el set con él sientes ese amor, se lo irradia a todo el equipo y a los actores. Es un set maravilloso en el que estar. Sientes que estás haciendo una película en los 70 o algo así", ha contado en una entrevista con Fab TV.