En 2002, un terremoto titulado Irreversible azotó el Festival de Cannes bajo el lema "El tiempo lo destruye todo". Dirigida por Gaspar Noé y con Monica Bellucci y Vicent Cassel en los roles protagónicos, la película era un experimento sobre el tiempo y lo temporal partiendo de una terrible historia de venganza–dos crímenes, un asesinato y una violación– narrada hacia atrás en el tiempo. Ahora, Noé acaba de presentar en la 76ª Mostra de Venecia un nuevo montaje, Irréversible-Inversion Intégrale, que narra los mismos hechos pero de forma lineal.
En esta ocasión, dice Gaspar Noé sobre el nuevo Irreversible que "el tiempo lo revela todo". En su declaración oficial en la presentación del filme, fuera de competición, el cineasta ha explicado los motivos que le han impulsado a volver a este filme de culto: "¿Por qué esta película? Ya que la original se narraba al revés y muchos espectadores, abrumados por la estructura hacia atrás del montaje, no entendieron ciertos aspectos de la historia. Presentada al derecho, todo está más claro y también es más oscuro. No se han cortado los diálogos, ni se han añadido cosas a la historia. Es por eso que esta versión se llama Inversion Intégrale. Hasta ahora, Irreversible era un rompecabezas intencionado. Ahora es un díptico, como un disco antiguo cuyo lado B es la mezcla menos conceptual de la pista en el lado A, pero esta vez con voces que son más audibles, lo que hace que el significado de las palabras sea más fatalista." En suma, 86 minutos de máxima angustia, se haya visto o no la película original.
Hasta ahora, 'Irreversible' era un rompecabezas intencionado. Ahora es un díptico, como un disco antiguo cuyo lado B es la mezcla menos conceptual de la pista en el lado A, pero esta vez con voces que son más audibles, lo que hace que el significado de las palabras sea más fatalista.
Con motivo de la presentación en La Biennale 2019, Irréversible-Inversion Intégrale estrena tráiler, que podéis ver sobre estas líneas. Queda por saber si el filme aterrizará en nuestras salas o en las pantallas de algún festival afín. ¿El Festival de Sitges, tal vez, donde Noé se llevó premio en 2018 con Clímax?