El nuevo plató de Sensacine se ha estrenado con dos invitados de altura, Mario Casas y Natalia de Molina para hablar de su próxima película: Adiós, dirigida por Paco Cabezas (American Gods) y que cuenta con el sello de producción de Enrique López Lavigne (Un monstruo viene a verme). Una película visceral, violenta y con mucho drama.
Mario Casas interpreta a Juan, un preso que tiene que enfrentarse al asesinato de su hija junto a su mujer Trini, a quien da vida Natalia de Molina. Para ambos la experiencia ha sido dura, ya que las circunstancias que comparten sus personajes son algo traumático y que ha llegado a afectarles dentro y fuera del rodaje, una gran carga emocional que les ha llegado a dejar "agujetas emocionales", en palabras de Natalia de Molina.
Gran parte de la película ha sido rodada en Sevilla, con escenas muy importantes en la barriada de "Las 3000 Viviendas". Para Natalia fue una experiencia y un regalo contar con la gente del barrio.
Fue más fácil rodar en las 3000 que rodar en el centro de Sevilla. La gente estaba más entregada, formaban parte del equipo, había un respeto absoluto... Se sentían representados con lo que se estaba contando. Fue una de las experiencias más increíbles que he tenido la suerte de vivir
Mario Casas es la segunda vez que se encuentra bajo la dirección de Paco Cabezas, habiendo coincidido en 2010 en Carne de Neón, pero siente que no ha perdido la esencia a pesar de su paso por Estados Unidos, donde ha estado dirigiendo serie como Fear The Walking Dead, Into the Badlands y American Gods, sacando siempre lo mejor de ellos con gran cantidad de cariño y respeto.
Puedes echar un vistazo al resto de la entrevista y no te pierdas Adiós en cines a partir del próximo viernes 22 de noviembre.