El pasado 26 de agosto llegaba a los cines la nueva película del director británico Christopher Nolan: Tenet. El filme, que es una cinta de espías cargada de teorías de física cuántica, ha sido muy comentado por los fans del 'techno' en redes sociales por su agitada banda sonora. Y es que, el cineasta inglés ha decidido no contar con la colaboración de su compositor habitual Hans Zimmer para encargarse de la partitura de la misma, y en esta ocasión ha tomado los mandos el músico sueco Ludwig Göransson (responsable de los temas de otros largometrajes como Venom o Creed).
La película de Nolan se ha convertido en una de las nominadas de los Globos de Oro a Mejor banda sonora por el trabajo de Göransson. ¿Se hará el compositor sueco con la estatuilla? Aprovechamos esta tesitura para repasar otros grandes 'original soundtracks' de este estilo como Tron Legacy, It Follows o La red social.
'Tenet' (2020)
El compositor alemán Hans Zimmer ha puesto la música a la mayor parte de las películas de Christopher Nolan, dejando temas para la historia del cine como Time (Origen), S.T.A.Y. (Interstellar) o Rise (El caballero oscuro. La leyenda renace). Pero para su última producción, Tenet (2020), el realizador británico ha decidido contar con los servicios de Ludwig Göransson, tras comprobar su buen hacer en trabajos anteriores como Black Panther o la serie The Mandalorian. Para esta ocasión, el músico sueco ha elaborado una muy potente partitura electrónica que acompaña a la perfección las trepidantes imágenes del filme protagonizado por John David Washington y Robert Pattinson. Lanzado bajo el sello WaterTower, el 'tracklist' contiene canciones tan potentes como Rainy Night In Tallinn, otros temas más espídicos como Freeport, o sonidos más 'retro' -con aroma a sintetizador- como The Algorithm. El 'pero' de esta novedad es que algunos espectadores han sido críticos con el filme, tachando su sonido de excesivo y de que los temas de Göransson en ocasiones son molestos para la comprensión de los diálogos del largometraje. A nosotros, sin embargo, nos ha encantado.
'Tron Legacy' (2010)
La película francesa Eden -que versaba sobre el movimiento cultural llamado 'french touch'- ya incluía algunas referencias a los grandes referentes galos de la música electrónica: Daft Punk. Pero, si bien la película que la realizadora Mia Hansen-Løve dedicaba a su hermano no contenía ningún tema original de la pareja en la banda sonora, sí lo hizo una secuela de una cinta de los 80: Tron: Legacy (2010). De esta manera tomaron el relevo de la estadounidense Wendy Carlos, que fue la encargada de producir los temas de la cinta original rodada en 1982 por Steven Lisberger. Walt Disney Pictures decidió tirar la casa por la ventana para encargar la partitura del filme futurista a un grupo que apenas se prodiga en conciertos, festivales y eventos, y cuya identidad -además- permanece en el anonimato ya que ambos siempre se hacen su aparición pública con cascos que no dejan ver sus verdaderos rostros. El resultado es un disco marca de la casa, que acompaña a la perfección las impresionantes imágenes de un filme visualmente potentísimo pero que adolece terriblemente en su desarrollo argumental y su ritmo narrativo en manos del realizador Joseph Kosinski (Oblivion, Héroes en el infierno). Un año después, la compañía lanzó un E.P. con ‘remixes’ titulado Tron Legacy: Reconfigured.
'Blade Runner' (1982)
Evangelos Odysseas Papathanassiou, más conocido como Vangelis, es uno de los grandes compositores de música electrónica y experimental de la historia del cine. Suyos son trabajos como 1492: La conquista del paraíso o Carros de fuego (por el que recibió el premio Oscar de la Academia de Hollywood en el año 1981). Pero sin duda, si hay que escoger una de sus partituras que más adeptos tiene entre los fans de la música de baile esa es Blade Runner (1982). La composición del autor griego acompañaba a la perfección a la historia futurista de Ridley Scott, en la que un agente de policía (Harrison Ford) dedicado al retiro de replicantes (unos 'cyborgs' que se han convertido en una amenaza para las autoridades y el orden social). Sus investigaciones le llevan a las más altas esferas de la Tyrell Corporation, el gen de estas criaturas, en una epopeya que le llevará a cuestionarse la esencia de los seres humanos y otras encrucijadas filosóficas y morales. El tema de los títulos con el que se cerraba la película ya es historia del cine y fue versionado en varias ocasiones para las pistas de baile a finales de los 80.
'Hanna' (2011)
Antes de ponerse tras las cámaras con Hanna, el director británico Joe Wright venía de un cine de corte clásico con largometrajes como Orgullo y prejuicio (adaptación de la famosa novela de Jane Austen) o Expiación (basada en otra obra, esta vez del escritor Ian McEwan). Por este motivo, sus películas contaban con bandas sonoras de compositores que optan por un estilo tradicional sinfónico como Dario Marianelli (responsable también de la música de Jane Eyre o Anna Karenina). Así que, no es de extrañar que cuando el realizador quiso darle un giro de 90 grados a su carrera con esta potente cinta de acción, también lo hiciese con la partitura que acompaña a sus imágenes. Los encargados de producirla, fueron el dúo británico formado por Tom Rowlands y Ed Simons: más conocidos como The Chemical Brothers. Estos productores, que apenas tenían experiencia en la composición de bandas sonoras originales cinematográficas, se sacaron de la manga un álbum con 20 pistas, justo un año después de su lanzamiento de su último disco Further. El resultado son temas cien por cien con el sello de los de Londres como Escape 700, mezclados con otros más pausados y experimentales como The Devil is in the Details (con un marcado acento infantil) o The Forest (que es puro 'ambient' cósmico).
'It Follows' (2015)
La cinta de terror It Follows se convirtió, sin duda, en la gran sensación entre los amantes del género allá por el año 2015. El boca-oreja tras su paso por festivales tan prestigiosos como Sitges o Austin, catapultó a la fama al segundo largometraje del realizador David Robert Mitchell. En ella, una muchacha (a la que da vida Maika Monroe) se acuesta con un chico que le pasa una extraña enfermedad sexual: ahora es perseguida por un extraño ente que le amenaza y que puede optar cualquier forma que se le antoje. Para realizar su banda sonora original, el cineasta encargó la misma al músico estadounidense Richard Vreeland, más conocido por el nombre artístico de Disasterpeace, todo un especialista en sonidos 'chiptune' u '8 bytes'. Estas composiciones se caracterizan por ser formatos en los que todos los sonidos son sintetizados en tiempo real por el chip de una computadora. El resultado es un 'original soundtrack' que recuerda al mejor John Carpenter, con temas estremecedores (hay uno titulado Hells, que pone la piel de gallina) y otros que son puro 'synth ochentero' como Detroit.
'Asalto en la Comisaría del Distrito 13' (1976)
El mítico realizador estadounidense John Carpenter siempre se ha caracterizado por escribir y crear gran parte de las bandas sonoras que acompañan a sus películas. Por ello, ha dejado algunas melodías que ya son historia del cine de terror como las de La noche de Halloween o El pueblo de los malditos. Pero para este especial hemos escogido la partitura de una de sus primeras películas: Asalto en la Comisaría del Distrito 13. En este filme, mezcla de suspense y acción (que tuvo un remake protagonizado por Ethan Hawke), unos agentes de policía y otros personajes quedan encerrados dentro de una comisaría. Mientras, en el exterior se producen una serie ataques indiscriminados de malhechores que buscan la muerte de los que están dentro y no se detendrán en su empeño. Para acompañar a esta angustiosa historia, Carpenter opta por una partitura electrónica de sintetizador con los retoques del músico Alan Howarth que es sin duda el precedente para muchos productos que vendrían en los años venideros.
'Turbo Kid' (2015)
La película Turbo Kid supuso todo un chute de 'revival ochentero' el pasado año 2015. El largometraje, que cuenta con la dirección del trío canadiense formado por Anouk Whissell, François Simard y Yoann-Karl Whissell, está protagonizado por una joven terna de actores (entre los que están Munro Chambers y Laurence Leboeuf) secundados por veteranos intérpretes como Michael Ironside (Desafío total, Scanners). El filme es una suerte de Mad Max protagonizado por adolescentes, ambientado en un mundo post apocalíptico, cargado de gore y humor negro. Para acompañar sus coloridas imágenes y su ritmo frenético se escogió a la banda de Québec, especializada en sonido 'Synthwave, Le Matos. De hecho, uno de los miembros del grupo, Jean-Philippe Bernier, también participó como director de fotografía en el largometraje. El álbum está plagado de temas 'rompepistas' como Wasteland o Playtime is Over. El dúo repetiría en la banda sonora de la siguiente película de Whissell, Simard y Whissell: Verano del 84, que llegó a las salas españolas en febrero del pasado año 2019.
'Diamantes en bruto' (2019)
Los hermanos Josh y Benny Safdie (ganadores del Spirit Award a los mejores directores en la edición de 2019) son dos de los nuevos referentes del nuevo cine independiente estadounidense. Tras el buen recibimiento en Cannes de su anterior filme, Good Time (que además supuso su lanzamiento al estrellato y a afrontar proyectos más ambiciosos), los realizadores decidieron repetir con el músico Daniel Lopatin -bajo el pseudónimo de Oneohtrix Point Never- para elaborar la composición de su nuevo trabajo: Diamantes en bruto. El resultado es un álbum cargado de temas 'ambient' en los que el sintetizador es la estrella y que tiene un tema de cierre (que en realidad no es del propio Lopatin sino de Gigi D'Agostino) que le deja a uno con la mandíbula colgando. El filme, que vira entre el drama y el suspense, cuenta la historia de un joyero judío del distrito Diamond de la ciudad de Nueva York (interpretado magistralmente por Adam Sandler), que no puede salir del mundo de las apuestas y que ya debe miles de dólares a su cuñado prestamista. Todo se enrevesa cuando le llegue un ópalo sobre el que pondrá los ojos el jugador de baloncesto Kevin Garnett durante una visita a su tienda.
'La red social' (2010)
El largometraje del año 2010 La red social fue uno de los grandes olvidados durante los premios Oscar de aquel año, a pesar de haberse alzado con los premios a la Mejor película dramática y mejor director en los Globos de Oro. Sin embargo, los productores de su partitura Trent Reznor y Atticus Ross sí que se llevaron el galardón a la Mejor Banda sonora. Se trata de una composición que acompaña perfectamente a las imágenes del filme que relata la creación de la red social Facebook y sirve como 'biopic' de la curiosa figura de Mark Zuckerberg. Sin duda, si el que escribe ha de quedarse con un tema del álbum, elijo In Motion; que es el sonido que acompaña a Jesse Eisenberg (que interpreta a Zuckerberg) mientras escribe código junto a sus compañeros de habitación, en lo que es el gen de la página web. La pareja de músicos volvió a repetir años después en otra película de Fincher: Perdida, que contaba con el protagonismo de Ben Affleck y Rosamund Pike.
'The Neon Demon' (2016)
En su película Drive, el realizador Nicolas Winding Refn hizo una selección de grandes temas de música electrónica para acompañar sus imágenes, de varios artistas que acompañaban a la compuesta por Cliff Martinez. Sin embargo -y a pesar de que sentimos predilección por Kavinsky y Electric Youth- hemos escogido para este especial la partitura que el músico realizó para la alocada y bizarra The Neon Demon. Martinez, que fue miembro de The Red Hot Chili Peppers durante algunos años, ha trabajado en largometrajes como Spring Breakers o Contagio. En esta ocasión hace uso de sonido puro de sintetizadores para acompañar las colorida (e iluminada) fotografía de esta cinta en el que se nos narra el descenso a los infiernos de una joven modelo en su intento por llegar a lo más alto de la pasarela y que tiene de todo: desde canibalismo a necrofilia. De su 'tracklist' nos quedamos con el tema inicial -y que da título al filme- y con la enérgica The Demon Dance.
'Carga maldita' (1978)
A finales de los 70, Hollywood pareció volverse loco. Fue la época en la que Martin Scorsese rodó El rey de la comedia, Francis Ford Coppola acometió la titánica tarea de sacar adelante Apocalypse Now, y William Friedkin sorprendía a propios y extraños con Carga maldita. Se trata de una rara avis dentro de la filmografía del director de El exorcista y French Connection (Contra el imperio de la droga). En ella se nos narra la historia de tres hombres de diferentes países que tienen una peligrosa misión: transportar un camión lleno de nitroglicerina por las selvas de Suramérica. Para acompañar sus imágenes, el cineasta eligió al grupo de electrónica experimental Tangerine Dream, en lo que fue su primera vez en el mundo del cine tras algunos álbumes de estudio. Un tracklist que es de lo mejorcito en cuanto a música electrónica compuesta para una película se refiere y que, sin duda, estaba adelantada a su tiempo. Hay que recordar que el popular Tubullar Bells de Mike Oldfield que acompañaba a la cinta más mítica del realizador (la ya citada El Exorcista) no estuvo compuesto especialmente para la película y, sin embargo, fue seleccionada para incluirla en la misma.