Este viernes 30 de octubre se estrena en los cines españoles Las Brujas (de Roald Dahl), nueva adaptación de Warner Bros. del libro infantil Las brujas firmado por Roald Dahl, también autor de Matilda, Charlie y la fábrica de chocolate, El gigante bonachón o James y el melocotón gigante. Detrás de las cámaras se encuentra el ganador del Oscar Robert Zemeckis (Forrest Gump), que ha contado con un reparto encabezado por las también premiadas por la Academia Anne Hathaway (Los miserables) y Octavia Spencer (Criadas y señoras), por el nominado Stanley Tucci (The Lovely Bones) y por el joven, casi debutante, Jahzir Bruno (The Oath). ¿Pero sabías qué detalle de La maldición de las brujas de 1990 con Anjelica Huston no aparece en esta última versión? Aunque no es ningún 'SPOILER' de la trama, te recomendamos que no sigas leyendo si prefieres esperar a verla.
En la novela de Dahl, de 1983, la abuela del protagonista de la historia le cuenta cómo diferenciar a una bruja de una mujer normal. Para empezar, las brujas tienen garras en lugar de manos con dedos -y por eso usan guantes; son calvas, y lo ocultan con unas pelucas que les provocan erupciones en la piel e intensos picores, y además sus pies carecen de dedos; son cuadrados, y ese es el motivo de que les sea muy incómodo llevar bonitos zapatos que acaban en punta -si te fijas bien, la Gran Bruja de Anne Hathaway, al igual que la de Huston, sí que presume de tacones. Todos esos elementos salen en La maldición de las brujas y en Las Brujas, así como su asombrosa capacidad olfativa. Así es como rastrean a sus presas, que para ellas huelen a excrementos.
Warner Bros.
Pupilas que cambian de color y... ¿saliva azul?
Curiosamente, en Las Brujas (de Roald Dahl) falta una característica que sí se lee en el libro original y que también tuvo una presencia importante en el anterior filme, dirigido por Nicolas Roeg: que las brujas tienen pupilas que cambian de color. En La maldición de las brujas, las enemigas de Luke (Jasen Fisher) pueden reconocerse por un matiz púrpura en sus ojos. Ninguna mención de esto último en la cinta de Zemeckis, que sí da a sus antagonistas una voz áspera, como bien recogía Dahl. Por último, ninguno de los títulos cinematográficos presta atención a otro rasgo, quizá porque es bastante extraño: su saliva azul, que hasta usan como tinta para escribir.
Si tienes grandes admiradores de la magia y de la fantasia en casa y no te importa que pasen un poquito de miedo, este viernes tienes una cita con la nueva The Witches -arriba puedes ver su tráiler oficial en castellano. Si además recuerdas La maldición de las brujas, seguro que lo pasas en grande.
