Sin tiempo para morir, la película número 25 de la franquicia James Bond y la despedida del actor Daniel Craig (Casino Royale, Quantum of Solace, Skyfall, Spectre) como el agente 007, se estrenará en los cines españoles el 2 de abril de 2021. Recientemente, y a pesar de los rumores, Metro-Goldwyn-Mayer (MGM) ha dejado claro que el filme de Cary Joji Fukunaga debutará en pantalla grande y no en 'streaming'. Pero ahora sabemos que a la compañía le está costando un millón de dólares en intereses al mes que el famoso espía creado por Ian Fleming esté retrasando su llegada a las salas.
La nueva aventura de Bond, que también contará con nombres como los de Ana de Armas, Rami Malek, Lashana Lynch, Léa Seydoux, Christoph Waltz, Naomie Harris, Ben Whishaw, Ralph Fiennes y Jeffrey Wright, iba a estrenarse en un principio en abril de este año. Pero la pandemia del coronavirus (COVID-19) lo ha complicado todo y de ahí ha pasado primero al mes de noviembre y ahora a abril de 2021. Su presupuesto ronda los 250 millones de dólares y varios medios, empezando por Bloomberg, han publicado que MGM ha intentado venderla a plataformas de 'streaming' como Apple o Netflix. ¿La razón? El mencionado pago mensual de un millón de dólares en intereses debido al préstamo para hacer Sin tiempo para morir.
Según informa ahora THR, MGM intentó cerrar un contrato de licencia antes de que el largometraje se retrasara de noviembre de 2020 a abril de 2021. Pero sólo Apple se atrevió a hacer una oferta. Esta rondaba los 350-400 millones de dólares a cambio de 12 meses de licencia, un número insuficiente para los 650-700 millones que esperaba consegir el estudio. Netflix, continúa este medio, ni siquiera se lo pensó con semejantes cifras. En realidad, es mucho más rentable para ellos centrarse en sus originales -para que te hagas una idea, 6 en la sombra de Michael Bay con Ryan Reynolds costó unos 150 millones de dólares y generó 83 millones de visionados sólo en su primer mes.
Títulos 'parados' sin retorno de inversión
Para Hal Vogel, director ejecutivo de Vogel Capital Research, "MGM está sufriendo". Y ese es el motivo por el que -aunque sin éxito- ha mantenido conversaciones para vender Sin tiempo para morir a una plataforma de 'streaming'. "Todos los distribuidores importantes tienen en este momento un montón de películas caras sin estrenar. La pila aumenta cada día. Estas películas son inventario. Están ahí paradas sin retorno de su inversión. Incluso con un interés bajo, los costes de los intereses se están acumulando. Así que apostar por la vía del 'streaming' no es tan descabellado. Has gastado el dinero y no lo vas a recuperar pronto".
Por supuesto, MGM no es la única marca con problemas dentro de la industria en la era de la COVID-19. Ahí están los casos de Warner Bros. con Tenet de Christopher Nolan -que ha recaudado poco más de 340 millones de dólares- y de Disney, que se ha visto obligada a ofrecer Mulán -previo pago- y Soul directamente en su plataforma de 'streaming' Disney+. La diferencia radica en que MGM, al no disponer de plataforma propia, tendría que vender lo último de Bond para ganar dinero.
Por de pronto, y hasta nuevo aviso, Sin tiempo para morir sigue señalada para abril de 2021.