El día antes de empezar a rodar Sound of metal, Riz Ahmed no pegó ojo. Ni ese, ni los siguientes. El actor no paraba de pensar en cómo iba a interpretar a un baterista exdrogadicto que se está quedando sordo. Ocho meses antes, había empezado un entrenamiento especial para aprender lengua de signos y tocar la batería y llegaba el momento de la verdad. En la primavera de 2018 empezó un rodaje que puso a prueba su lado más controlador. El director, Darius Marder, no le dejaba analizar las escenas que iban rodando y se negaba a analizar más de la cuenta. Ahmed casi pierde la cabeza, pero, ahora, en marzo de 2021, optan a seis premios Oscar.
Sounf of metal es una de las ocho nominadas a Mejor película en la 93ª edición de los premios de la Academia. Eclipsada por títulos como Mank, Minari o Nomadland -la gran favorita-, pocos han hablado de ella, pero tiene mucha fuerza y sitúa a Marder en el mapa. Si Ahmed es un actor obsesivo al que le gusta tener el control, el realizador no se queda lejos. Tardó 13 años en dar con el protagonista para contar la historia de Ruben, un joven batería de un grupo punk que ha logrado superar su problema con las drogas. Un día empieza a escuchar pitidos y recibe la noticia de que se está quedando sordo.
Crítica: ¿Cuál es la mejor película de las nominadas a esta categoría en los Oscar?Dejarse llevar por el pasado de adicciones del personaje a medida que acepta su sordera es una transformación para la que no todo el mundo está preparado. El director Darius Marder quería asegurarse de que daba con el actor ideal y ponía a prueba a todos los candidatos pidiéndoles cosas fuera de lugar para ver cómo reaccionaban. No dio con lo que buscaba en más de una década, hasta que Riz Ahmed se cruzó con él y clavó lo que buscaba.
Para dar vida al protagonista, Riz Ahmed se enfrentó a varios retos que le pusieron a prueba como actor. El primero de ellos, aprender a tocar la batería. Ahmed pasaba dos horas diarias en un estudio de Brooklyn aprendiendo a aporrear el bombo con el suficiente tino como para que en pantalla pareciese que sabía lo que hacía. Asegura que sus habilidades como músico dejan mucho que desear, pero nadie lo diría al ver la cinta. Para acercarse a la autenticidad, el intérprete se empapó de la escena punk. Pasó tiempo con el grupo Surfbort y con baterías que le explicaban que se dejaban llevar por su pasión, en lugar de centrarse en la técnica. De una manera u otra, el intérprete reunió estos consejos y dio forma a un personaje totalmente real.
Otro de los retos fue meterse en la piel de un exdrogadicto. A medida que se da cuenta de que la sordera es permanente, tiene que luchar para no dejarse llevar por sus adicciones. En este caso, el actor no ha tenido problemas, ya que conocía muy bien el estado emocional por el que pasa su personaje. “He estado dentro y alrededor de ese mundo y he visto de cerca lo que la adicción puede hacerle a la gente. Es algo con lo que he estado íntimamente relacionado”, explica en una entrevista con Deadline.
Por último, Ahmed aprendió de manera exprés a comunicarse mediante lengua de signos y, lo que es más complicado, a aprender la realidad de una persona sorda. Gracias a su inmersión en esta comunidad, se dio cuenta de que hay matices. Por ejemplo, no es lo mismo ser hijo de una pareja sorda o pertenecer a la raza negra. Se sumergió en esta experiencia y empezó a expresar sus emociones con todo su cuerpo, sin esconder nada, tal y como hacen las personas sordas. “Hay una broma que me decía mi profesor de lengua de signos que era: ‘Si quieres que un secreto salga a la luz, díselo a una persona sorda’. La comunidad sorda cree que los oyentes están emocionalmente reprimidos porque escondemos palabras”, explica Ahmed a Deadline.
Para el actor y su personalidad obsesiva ha sido un trabajo que ha rozado la locura. "El periodo previo al rodaje estaba lleno de miedo. El proceso de Riz ha sido muy intenso. No ha sido relajado", desvela Marder a The New York Times. El proyecto le provocó insomnio -llegó a cambiar de colchón hasta en dos ocasiones- y la prohibición del director de analizar el guión o revisar las escenas grabadas le hizo perder los nervios. Desarrolló casi un comportamiento adictivo que, por otro lado, iba a la perfección con su personaje. Cuando aceptó que Marder le pedía que confiase en su instinto se dejó llevar y pudo entregarse al personaje.
Oscar 2021: Lista completa de nominados y todo lo que debes saber de las películas candidatasRiz Ahmed opta al Oscar como Mejor actor. Compite contra Chadwick Boseman (La madre del blues), Anthony Hopkins (El padre), Gary Oldman (Mank) y Steven Yeun (Minari) y, en nuestra quiniela particular, el voto va, sin duda, para él, que podría convertirse en el primer musulmán ganador de la estatuilla. Un año de delirio, entre preparación y rodaje, que debe dar su fruto.