La identidad y su búsqueda han protagonizado la segunda jornada del Festival de Cine de San Sebastián. La Sección Oficial ha arrancado con lo nuevo del cineasta Terence Davies: Benediction, un fino y sensible ‘biopic’ sobre el poeta Siegfried Sassoon, un hombre complejo marcado por los horrores de la Primera Guerra Mundial y su intento de aceptar su homosexualidad. En competición también vemos Arthur Rambo de Laurent Cantet, una reflexión sobre cómo las redes sociales distorsionan nuestra identidad y pueden arruinar tu proyecto de vida. Y también de identidades y su descubrimiento en la adolescencia habla la argentina Camila saldrá esta noche, una fantástica observación sobre el despertar, el género y la violencia sexual que firma la cineasta Inés Barrionuevo.
Ya en Perlak, nos adentramos en Petit Maman,lo nuevo de Céline Sciamma -uno de los grandes nombres de 2019 por su película Retrato de una mujer en llamas Pero en esta ocasión Sciamma firma un cuentito de 74 minutos, que nos sumerge en la búsqueda de los orígenes y la mente de una niña de 8 años. También vemos Un amor intranquilo, un desgarrador relato sobre una familia y cómo se ve afectada por el trastorno de bipolaridad que sufre uno de sus miembros.
'Benediction'
Siegfried Sassoon, el complejo poeta inglés que sobrevivió a los horrores de la Primera Guerra Mundial, es el protagonista de Benediction, la nueva película de Terence Davies. El director de La casa de la alegría (2000) y The Deep Blue Sea (2011) vuelve al 'biopic' tras su largometraje sobre la también poeta Emily Dickinson Historia de una pasión (2016). Con este último trabajo, el cineasta ya estuvo presente en el Festival de San Sebastián en su 64ª edición. Ahora, Davies regresa cinco años después al certamen para competir por la Concha de Oro con Benediction.
Sassoon, después de combatir en la I Guerra Mundial, se volvió muy crítico con la continuación en el conflicto por parte de su gobierno. De su paso por la guerra se nutrió gran parte de su poesía. Davies conjuga estos dos elementos haciendo que los poemas de Sassoon se desplieguen en la pantalla, en voz e imágenes llenas de belicismo. Lo nuevo de Davies brinca en el tiempo centrándose en la época de juventud del poeta y mostrando algunos apuntes sobre su vejez. Jack Lowden y Peter Capaldi se van pasando el personaje para que Davies profundice en el intento del protagonista de aceptar su homosexualidad y en su búsqueda de la salvación posterior a través del matrimonio y de la religión .
Benediction es todo lo que se puede esperar de una película de Davies. Una imagen fina y elegantísima con unos diálogos muy cuidados, irónicos a veces y que los actores recitan con una dicción exquisita. La melancolía y la sensación de teatralidad está muy presente en un delicado largometraje en el que el director vuelve a dar muestra de su gigantesca capacidad para el lirismo y la solemnidad. Para algunos, Benediction supondrá hastío. Para otros, regodearse en la tremenda sensibilidad del director.
Lowden firma una gran interpretación, distinguida y notable. A destacar un largo plano final que el actor aguanta con gran destreza. Y qué decir de Capaldi como ese Sassoon anciano que lleva arrastrando el dolor y el arrepentimiento en sus recuerdos. La sola presencia en pantalla del actor -que se ganó el corazón de muchos como el Doctor en Doctor Who- es inmensa. Decía Davies en una entrevista con Screen Daily que tuvo mucha suerte de que Capaldi, a quien hemos visto recientemente como Thinker en El Escuadrón Suicida (2021), dijera que sí a aparecer en su película: "Peter te parte el corazón. Podrías mirar a esa cara para siempre". Nada más que añadir.
'Camila saldrá esta noche'
En el pase del Teatro Victoria Eugenia el aplauso ha sido incontestable para Camila saldrá esta noche, la última película de la directora argentina Inés Barrionuevo (Córdoba, 1980). Su película también aborda de identidad a través del despertar a una nueva vida de una adolescente que comienza a descubrir el mundo, y su propia sexualidad al mudarse a Buenos Aires. Camila es una joven contestaria, feminista, combativa, que debe empezar una nueva vida con su madre y su hermana en una nueva ciudad y con una escuela católica como único espacio de socialización.
La película es un retrato de la adolescencia que compite en la Sección Oficial con la obra de Jonás Trueba, Quién lo Impide, con quien coincide en el retrato de la adolescencia desde la fascinación y la admiración por la libertad con la que viven su despertar vital, y las certezas con las que avanzan en su recién estrenada vida de adultos. Incluido el choque brutal con la realidad y la violencia hacia el cuerpo femenino que se encuentra en la última parte de la película.
Se trata de la cuarta película de Inés Barrionuevo, que muestra un talento ya estrenó su primer largo en esta misma sección en 2014, Atlántida, y su segundo largo en el Festival de San Sebastián, Julia y el zorro (2018).
'Arthur Rambo'
La nueva película de Laurent Cantet, Arthur Rambo, nos arrastra también a pensar sobre la identidad y la imagen desde dos ángulos diferentes. Cuenta la historia de Karim D., un escritor de origen inmigrante, que desata pasiones con su libro en el que cuenta la historia de su madre y cómo se siente extranjero en su propio país y discriminado por las élites blancas francesas. El escritor se convierte en un fenómeno y un espejo para los miles de inmigrantes del extrarradio parisino. Pero cuando Karim D. está empezando a disfrutar de su éxito irrumpen en su vida los mensajes subversivos, insultantes y provocadores que posteó cuando era un adolescente en Twitter con un alter ego ficcional llamado Arthur Rambo. Y tendrá que gestionar el ataque social que genera, y tratar de defender que el personaje de ficción no tiene nada que ver con el personaje real.
La historia de Karim D. está inspirada en lo ocurrido al locutor de radio Mehdi Meklat a quien hundieron su carrera unos viejos tuits que escribió con un pseudónimo en 2017, según explicó el ganador de la Palma de Oro en Cannes, con La Clase en 2008. Laurent Cantet, vuelve al Festival de San Sebastián donde fue presidente del jurado en 2009, donde en 2012 la protagonista de Foxfire (Katie Coseni) obtuvo la Concha de Plata a la mejor actriz.
En esta ocasión Cantet vuelve a cuestionar el orden establecido en Francia, y se adentra en la construcción de la imagen y las redes sociales y lo peligrosas que pueden llegar a resultar. Y la película funciona a pesar de lo convencional de su narrativa, porque algunas de sus frases siguen retumbando en la cabeza del espectador horas después de haber salido del cine. Quizás la única pega es que la aproximación que hace Cantet al tema tiene una mirada demasiado alejada de las redes sociales, con una distancia generacional de este fenómeno.
'Petite maman'
En la sección de Perlak hoy descubrimos una de las joyitas del festival: Petite maman, de Céline Sciamma. Y digo joyita porque apenas dura 74 minutos, y es una película formalmente sencilla y desnuda, pero que abre muchísimas puertas a la reflexión. La directora, después de la complejidad de la producción de Retrato de una mujer en llamas, nos ofrece un cuento sencillísimo pero hermosísimo también.
Petite maman nos cuenta la historia de una niña de 8 años que viaja con sus padres a la casa de su abuela en el bosque, una abuela que acaba de fallecer. Mientras sus padres vacían la vivienda, ella explora el bosque, el que fue el universo de su madre de de niña, y descubrirá también la cabaña que ella construyó.
El peso de la historia recae en la interpretación de las dos actrices, dos hermanas, muy parecidas entre sí -en algún momento el espectador puede pensar que es solo una actriz-. Apenas hay música, salvo un peculiar tema que acompaña a las niñas a explorar una extraña pirámide en medio de un lago, y los diálogos recaen en las niñas en un 80% de la película. Es habitual que Sciamma trabaje con la infancia y la adolescencia como materia prima de sus películas, como su ópera prima con los adolescentes de Naissance des pieuvres, o en Girlhood e incluso Tomboy.
Y esas niñas le sirven, como suele ser habitual en la obra de esta fabulosa cineasta francesa, para hablar de mujeres y cómo buscar en los orígenes de nuestra propia identidad para construir nuestro propio universo, y de paso, una reflexión, quizás algo culpable, de la maternidad. Un cuento tierno, aunque desnudo, y un viaje emocionante hacia la infancia y su universo.
'Un amor intranquilo'
Para cerrar la jornada, vemos Un amor intranquilo, otro de los títulos de la sección Perlak que llegan al Festival de San Sebastián tras su paso en Cannes. Dirigida por Joachim Lafosse, la película sigue el día a día de una familia en la que uno de sus miembros, el padre, es bipolar.
Para mostrar esta realidad, Lafosse sigue la cotidaneidad de los protagonistas y cómo esta se destruye cada vez que Damien sufre uno de sus brotes. El filme muestra ambos lados de la historia a través de un desgarrador relato de esta enfermedad mental. Poco a poco, Damien pasa de la efusividad a la temeridad, poniendo en peligro su vida y la de su hijo.
Un largometraje crudo que brilla especialmente en su segundo acto, cuando más se centra en uno de los ataques del protagonista y todo se inunda de riesgo y amenaza. También son importantes las interpretaciones de sus protagonistas Leïla Bekhti y Damien Bonnard. Una historia realista y descarnada difícil de olvidar.
