Denis Villeneuve reconoce que no habría podido rodar Dune hace una década. El director, fan acérrimo del libro de Frank Herbert, tenía una idea muy concreta de cómo quería que fuese la adaptación y solo se ha atrevido a hacerla cuando se ha visto preparado para ello. "Ha sido, sin duda, lo más duro que he hecho", asegura el cineasta en una entrevista con Total Film.
Villeneuve está fascinado con el universo de Arrakis desde que leyó la novela cuando era un adolescente. Desde entonces, ha ido tomando nota mentales de todos los lugares por los que ha pasado y todas las experiencias que ha vivido para poder dar forma al relato si alguna vez tenía la oportunidad. Y lo ha conseguido. "Hay un placer enorme cuando las imágenes que has conseguido se acercan a las que tenías en mente cuando eras un adolescente. Es orgásmico. Pero los fallos son muy difíciles porque decepcionas al adolescente que hay en tu interior. Como dice Hans Zimmer [compositor], es muy peligroso intentar alcanzar tus sueños más antiguos", declara en la entrevista.
Como decimos, Villeneuve ha ido construyendo Dune poco a poco, sin prisa, durante décadas. Por ejemplo, en 2010 rodó Incendies en el desierto de Uadi Rum en Jordania, también conocido como Valle de la Luna. Su arena roja y basta extensión hacen que parezca un paisaje de otro planeta y muchas producciones lo han usado para filmes de ciencia ficción como The Martian o el Episodio IX de Star Wars: El ascenso de Skywalker. Desde que lo conoció hace diez años, Villeneuve sabía que ahí era donde iba a grabar Dune.
Recuerdo tomar notas mentales: 'Si alguna vez hago la película, volveremos aquí. Aquí es donde Paul se sienta... Pero era una completa fantasía
Sabía que quería rodar Dune y cómo quería que se viese, pero le faltaban conocimientos de realización. Con cada nueva película ha ido ganando la experiencia necesaria, pero han sido La llegada (2016) y Blade Runner 2049 (2017) las que más le han ayudado a darle forma a su visión. En un encuentro durante el Toronto International Film Festival, según recoge The Wrap, declaró que es un "aprendiz lento" y que no habría sido capaz de hacer Dune sin las herramientas que tiene ahora.
"Tengo una especie de dispositivo autodestructivo dentro de mí para sacar adelante proyectos que están fuera de mi alcance", señala el cineasta. Villeneuve se ha convertido en todo un ejemplo de perseverancia y los que ya han visto su visión de la novela de Frank Herbert solo pueden preguntarse cuándo se estrenara la segunda parte de Dune.
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