Dune, la película de Denis Villeneuve que adapta la primera mitad de la novela homónima de Frank Herbert, es una de las películas imprescindibles del año. El filme, protagonizado por Timothée Chalamet, lleva recaudados más de 77 millones de dólares. Y esa cifra es el total de todos los territorios -España es uno de ellos- en los que el filme se ha estrenado en cines antes de llegar a las salas y a HBO Max en Estados Unidos el 22 de octubre. Si ya has visto la película, te habrás dado cuenta de que Villeneuve introduce elementos de la tauromaquia: una figura de un torero capeando a un toro, una cabeza de este animal colgada de la pared y el retrato de un hombre vestido con traje de luces. Pero, ¿de dónde salen todas estas imágenes? Te lo contamos.
En la novela de Herbert se explica que Paulus Atreides, el abuelo de Paul y padre del duque Leto (Oscar Isaac), tenía como afición torear y que, precisamente, esa pasión acabó con su vida. En concreto, fue un toro salusano -procedentes del planeta Salusa Secundus y destinados a espectáculos similares a las corridas de toros- quien lo mató. La cabeza de toro que los Atreides tienen colgada de la pared del comedor de su residencia en Arrakis es precisamente el animal que acabó con su vida.
Pero Herbert va más allá en su novela. Cuando la familia protagonista está desempaquetando sus pertenencias en su nuevo hogar en Dune -tras abandonar su planeta de origen Caladan-, una conversación entre dos personajes da más información sobre esa cabeza de toro.
En las páginas del libro, Lady Jessica (Rebecca Ferguson) le cuenta a Shadout Mapes -la Fremen que se convierte en el ama de llaves de los Atreides en Arrakis- que los cuernos del toro tienen todavía la sangre de Paulus Atreides. Para conservar el fluido, se aplicó un fijador en ellos.
"No es suciedad, Mapes", se lee en la novela cuando Shadout Mapes le dice a Lady Jessica que antes de colgar la cabeza deberían limpiarla. "Es la sangre del padre de nuestro duque. Esos cuernos fueron rociados con un fijador transparente pocas horas después de que este animal matará al Viejo Duque". Además, la madre de Paul Atreides también indica a su ama de llaves que hay que colgar la cabeza del toro y el retrato de Paulus en paredes opuestas, enfrentando ambos objetos.
Al igual que en la película de Villeneuve, las menciones hacia la pasión por la tauromaquia del padre del duque Leto en el libro de Herbert son escasas. Tan solo hay una pequeña conversación entre Paul y su padre al respecto. Por lo tanto, es más que probable que, si Villeneuve consigue llevar a cabo la secuela de Dune y finalizar la adaptación de la novela, no veamos en la segunda parte ninguna referencia a esta afición del abuelo de Paul.
Villeneuve ha adelantado que si recibe pronto luz verde, podría comenzar a rodar la segunda parte de Dune en 2022. Teniendo en cuenta los buenos datos de taquilla del filme y que todavía queda por ver cómo se comporta la película en Estados Unidos y otros territorios, parece ya una realidad que el director podrá ponerse detrás de las cámaras para seguir contando la historia de Paul Atreides.