El último duelo, la última película de Ridley Scott, ha llegado a los cines españoles para contar el proceso que desencadenó el último juicio por combate. Se basa en la novela de mismo nombre escrita por Eric Jager en 2004, pero algunos elementos han sido modificados para adaptar la trama al lenguaje cinematográfico, añadir ritmo o, simplemente, explicar mejor las motivaciones de alguno de sus personajes.
Una de las grandes diferencias que existen entre el filme y el libro de Jager es que Scott da espacio a Marguerite -el personaje de Jodie Comer- para que podamos conocer los hechos desde su punto de vista, cosa que no sucedía en las páginas. Ella es la víctima del suceso que origina el duelo y parte fundamental de los implicados, por lo que el cambio que incluye la cinta era totalmente necesario. De otro modo se habría obviado la opinión de la joven.
La película nos muestra a una Marguerite que cumple a la perfección con lo que se espera de ella como esposa, pero tiene otras virtudes. Su personaje es inteligente, con gran capacidad de organización y responsabilidad en torno a su finca. Pasa largas temporadas sola, ya que su marido tiene que marcharse al frente, y es en ese periodo de tiempo donde demuestra sus dotes administrativas.
Marguerite es retratada como alguien con gran autonomía, una mujer fuerte que tiene la valentía de mantener su versión de los hechos a pesar de la sociedad tan crítica y juzgadora en la que vive. La película incluso incluye el debate de su vida sexual, presentando a la joven como insatisfecha y descontenta al no poder quedarse embarazada.
Algunos comentarios se quejan de que la parte de Jean De Carrouges (Matt Damon) y Jacques Le Gris (Adam Driver) pesa mucho más que la de Marguerite (Comer), pero al menos el equipo creativo de la película se ha tomado el tiempo para crearle su propia trama. De manera inevitable, se han tomado alguna que otra licencia creativa. Solo así han podido construir un personaje tan fuerte como suponemos que fue.
¿Quiénes fueron las personas reales que inspiraron 'El último duelo'?Por lo que se sabe, la verdadera Marguerite de Carrouges debió de ser una adelantada a su época. No era habitual por aquel entonces que las mujeres denunciaran abusos sexuales y, menos aún, que su voz desencadenase tanto revuelo como lo hizo su caso. El apoyo de su marido Jean fue una de las claves para terminar en el juicio por combate que limpió su reputación.
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