A día de hoy el audiovisual turco triunfa en las cadenas privadas de nuestro país -y también a nivel internacional- gracias a series como Love is in the air, Fatmagül o Pájaro soñador. Tal es el éxito de las mismas que en España ya se están preparando 'remakes' de algunas (el caso de Alba y Heridas en Antena 3) y la todopoderosa plataforma de 'streaming' Netflix ya produce sus propios productos en la misma línea. Toda una sensación que, todavía, los expertos tratan de explicar. Pero hubo un tiempo en que la producción turca no llegaba a todos los países como lo hace hoy en día y era bien diferente a esas historias de amor y drama que vemos en nuestras pantallas de televisión actualmente.
Durante los años 70 y 80 los videoclubs de toda España se llenaron de películas de explotación italiana: se trataban de copias o secuelas sin licencia de grandes éxitos de Hollywood. Producciones, en la mayoría de los casos, de producción paupérrima que encumbró a realizadores como Sergio Martino, Lucio Fulci o Bruno Mattei. Sin embargo, con la llegada de Internet y de los servidores de vídeo ‘online’, los fánaticos del cine más bizarro se asomaron a unos dementes y espídicos 'remakes', que iban mucho más allá que aquellas cintas de 'serie B' transalpinas: las versiones turcas de grandes éxitos turcos.
A pesar de que no era la intención de los cineastas que las perpetraron, aquellos 'remakes' eran todo un viaje histriónico, enajenado y sin sentido (en la mayoría de los casos) que resultan de lo más divertido y desconcertante para el espectador occidental. El centro de producción de Turquía, al más puro estilo Hollywood, era Yeşilçam Beyoğlu; lugar donde entre los años 50 y 80 se rodaban películas a toda vela y, en su momento álgido, era la tercera industria más prolífica del planeta. Pero que se filmasen tantos largometrajes al cabo de un año, no aseguraba la calidad de los mismos. Muchas de estas cintas eran simplemente adaptaciones muy libres de propiedades extranjeras, realizadas sin ningún tipo de licencia o permiso por parte de las compañías que tenían los derechos. Vamos a repasar algunas de las más famosas copias turcas de éxitos de otros países.
'Dünyayi Kurtaran Adam' (1982)
Durante los años 80 Star Wars se convirtió en todo un fenómeno internacional y supuso grandes dividendos para su creador George Lucas. Debido al éxito mundial de la película de 20th Century Fox, no tardaron en salir al mercado películas que trataban de imitar su fórmula. De esta forma nacieron películas estadounidenses de gran presupuesto como El abismo negro (un intento de Disney por sumarse a moda galáctica) o producciones italianas como Star Crash (que contaban con un reparto internacional para tener más mercado). Pero sin duda alguna, Dünyayi Kurtaran Adam -que podría traducirse como El hombre que salvó el mundo- es la más desvergonzada de todas.
El actor Cüneyt Arkin era -además de director y guionista- una de las mayores estrellas del panorama turco durante la década de los 70 y 80. Con cientos de películas a sus espaldas, Arkin es una leyenda de su país e incluso llegó a portar la antorcha en los Juegos Olímpicos de Pekín en 2008. De esta manera, usando al actor más importante de su país como reclamo, el cineasta Çetin Inanç decidió rodar su propia versión de Star Wars de la que, directamente, robó escenas las cortó y las pegó en la bobina de su propia película (además de 'tomar prestada' la popular música de Indiana Jones creada por John Williams). Aunque debido a su lisérgico montaje y edición, la película es complicada de seguir, su argumento podría ser el siguiente: Dos pilotos estrellan sus naves en un planeta desértico, donde un hechicero diabólico busca el poder supremo para dominar el mundo. Cómo se puede comprobar el parecido con la saga de Lucas es mínimo, pese a desarrollarse en el espacio, aunque constantemente vemos batallas de ‘starfighters’ a lo largo de su metraje.
A día de hoy, Dünyayi Kurtaran Adam es considerada una de las peores películas comerciales de la historia, pero también un filme de culto. Tal es la devoción de algunos espectadores por el filme que se organizan proyecciones a modo de evento (como su paso reciente por el Cine Paz en el marco del certamen CutreCon), y llegó a tener una secuela en 2006 (aunque con mucho menos tirón que su predecesora).
'Süpermen dönüyor' (1979)
En el año 1979 el director Richard Donner consiguió llevar a buen puerto la primera gran película de superhéroes de la historia: Superman. Inspirada en uno de los personajes más populares de los cómics de DC, la cinta se convirtió en un éxito de taquilla mundial. Por lo que, los turcos rápidamente se apresuraron a hacer su propia versión del largometraje de Warner Bros: Süpermen dönüyor.
Con un presupuesto paupérrimo, que no le permitía ni de lejos tener los efectos especiales de Superman, el director Kunt Tulgar encaró la difícil tarea de versionar la cinta de Donner. Para protagonizarla, el cineasta contó con un amigo suyo que no era actor y se encontraba haciendo el servicio militar en aquel momento: Tayfun Demir. El que éste no se hubiese puesto nunca profesionalmente delante de la cámara se percibe en cada detalle de Süpermen dönüyor y es que tenemos como resultado una de las interpretaciones menos expresivas y más risibles de la historia del cine. Tulgar tampoco gastó presupuesto en la banda sonora del largometraje, ya que se apropia sin vergüenza alguna del 'score' original compuesto por John Williams e incluso de la banda sonora de algunas entregas de la saga James Bond.
Los otros Spider-Man antes del multiverso de 'No Way Home'Los diseñadores de producción -si es que los hubo- decidieron, por su parte, que era buena idea presentar el planeta originario de Superman (Krypton) como si de un decorado navideño se tratara. Por otra parte, el guión no difiere mucho del de Mario Puzo y David Newman y nos presenta a un joven Clark Kent al que sus padres confiesan que es extraterrestre, por lo que este marcha a la fortaleza de la soledad donde se encontrará con el espíritu de su padre Jor-El. Una película con desarrollo muy torpe, que está llena de momentos ridículos y que cualquier fan del cine cutre debería ver al menos una vez en su vida.
'Homoti' (1983)
E.T. El extraterrestre se convirtió en uno de los grandes éxitos cinematográficos de los años 80 y terminó encumbrando a su director, Steven Spielberg, como uno de los grandes artífices del cine familiar y del 'blockbuster'. El filme narra la historia de cómo un extraterrestre se pierde en nuestro planeta y acaba entablando una entrañable amistad con un niño de una pequeña localidad estadounidense. Debido a su éxito, en Turquía el filme llegó a tener dos 'remakes': Badi (1983) y Homoti (1987), siendo este último el más loco y de factura más pobre de los dos.
Dirigida, escrita y protagonizada por Müjdat Gezen un activista que llegó a estar en prisión por algunos escritos e incluso ha tenido algún rifirrafe en televisión con el presidente Erdoğan, Homoti nos presenta a una peculiar versión de E.T. El extraterrestre: se trata de un alienígena homosexual. Pese a sus buenas intenciones y tratar de visibilizar a un colectivo muy perseguido en el país otomano, es un largometraje que causa la risa en el espectador por sus absurdos diálogos y, sobre todo, por los efectos de maquillaje del personaje protagonista (muy alejado de la creación de Carlo Rambaldi). Mención aparte merece el trasero que luce el disfraz del ser de otro planeta.
Una vez más, a pesar de ser un 'mockbuster' (o película que toma descaradamente la idea de otra), Homoti cambia parte del argumento del original: en ella conocemos la historia de un reportero que debe inventarse una historia falsa sobre avistamientos OVNI, a instancias de su jefe. Pero, para su sorpresa, acaba conociendo a un alienígena gay -que se encuentra perdido en Turquía- al que acaba acogiendo en su propio hogar.
'Seytan' (1974)
Allá por el año 1973 se formaban enormes filas en los cines de todo el planeta para ver uno de los grandes fenómenos cinematográficos de la época: la terrorífica El exorcista. En ella, el joven realizador William Friedkin tomaba como referencia un 'best seller' escrito por William Peter Blatty para narrar la historia de una chica que es poseída por el demonio cuando practica el juego de la ouija en el ático de su casa. Mientras, en Turquía el cineasta experto en cine épico ambientado en el Imperio Otomano, Metin Erksan, decidía hacer su propia adaptación del libro de Blatty, copiando plano a plano la película de Friedkin.
Y es que, si El exorcista dio pie a varios filmes que trataron de imitar su estilo y su temática como El visitante del más allá o Poder maléfico -e incluso parodias como Reposeída- Seytan es el plagio más descarado y desvergonzado de cuantos se pueden encontrar en el cine. De hecho, la actriz protagonista Canan Perver (que da vida a la pequeña Gül) guarda gran parecido con Linda Blair (que interpretaba a Regan MacNeil en la original de 1973), e incluso imita todos los gestos de ésta en el filme.
Un filme con presupuesto muy pobre, que visto a día de hoy puede convertirse en una épica comedia involuntaria, pese a que las intenciones del realizador fuesen las contrarias. Una cinta que hace gala de una fotografía quemada y con grano, maquillaje de carnaval, actuaciones de función escolar y decorados de cartón.
'Korkusuz' (1986)
Tras hacerse un hueco en el firmamento de Hollywood con la oscarizada Rocky, el actor Sylvester Stallone se convirtió en uno de los grandes héroes de acción de los 80 gracias a su papel de John Rambo en la película Acorralado. Dicho largometraje tuvo tanto éxito que daría pie a cuatro secuelas y convertiría a su protagonista en todo icono de la cultura pop (con series de animación y todo tipo de 'merchandising').
En Italia fueron varias las películas de explotación que calcaban el estilo de Acorralado y sus secuelas e, incluso, en Filipinas se rodó una parodia que llegó a distribuirse en el mercado doméstico español: Johnny Tan-go Rambo. Por supuesto, en la factoría cinematográfica de Yeşilçam Beyoğlu no iban a quedarse atrás: fue el mismísimo director de la ya citada Dünyayi Kurtaran Adam (el realizador Çetin Inanç) –que años atrás había tomado "prestada" la bobina de El imperio contraataca para recortar algunas escenas- el encargado de llevar a cabo el plagio de la popular franquicia de acción: Korkusuz (también conocida como Rampage).
'Italian Exploitation': Cuando la serie B copiaba los éxitos de HollywoodPara rodarla, traslado a todo el equipo técnico y al reparto a la localidad otomana de Foça donde había el campamento de un comando militar real que además prestó las prendas que los villanos del fime portarían durante el rodaje. El resultado es otro desastroso filme cuya trama es imposible de seguir y cuyo montaje parece realizado por un demente al que se le han dejado los mandos de la sala de edición. Tiene un tramo final épico en el que las muertes se suceden por doquier y con actuaciones al borde del paroxismo.
'Çöl' (1983)
De nuevo tenemos una cinta del inefable realizador Çetin Inanç en la que repite con el legendario Cüneyt Arkin como protagonista. En esta ocasión, Çöl no se trata tanto de un 'mockbuster' al uso sino de una cinta que toma elementos de Tiburón y cuyo resultado parece una mezcla de De profesión: duro, Los supercamorristas y la película de Spielberg.
En el filme, Arkin interpreta a un héroe de acción experto en artes marciales que es capturado por los villanos de la trama. En lugar de matarle, lo atan a una tabla y lo dejan en medio del mar. En pleno océano, tendrá que hacer frente a las fauces de un gigantesco tiburón si quiere seguir con vida y volver a tierra firme con la chica que le gusta.
Se cuenta que el título real iba a ser El desierto azul (Mavi Çöl), por la situación en la que se encuentra el protagonista en medio del mar. Sin embargo, el propietario de la imprenta donde se realizaron los carteles pensó que debía ser un error porque los desiertos no son azules. Acto seguido, llamó a los realizadores del filme, pero como no pudo comunicarse con nadie, tomó la iniciativa e imprimió todos los carteles con el título Çöl (Desierto). Cuando los responsables se enteraron, en lugar de gastar dinero en nuevo material promocional, decidieron dejar este nuevo título.
'Altın Çocuk' (1966)
En 1962 Eon Productions lanzaría la película Agente 007 contra el Doctor No, primera de las adaptaciones cinematográficas de la obra literaria creada por el escritor Ian Fleming sobre las andanzas del implacable James Bond. El filme fue un éxito mundial, dió origen a una de las sagas cinematográficas más longevas de todos los tiempos y catapultó a su protagonista Sean Connery. En uno de sus primeros intentos de copiar todo lo que tiene gran rendimiento a nivel internacional y extrapolarlo a su forma de hacer cine, la industria de Yeşilçam Beyoğlu lanzaría su propia versión del famoso agente secreto Altın Çocuk (traducido como Golden Boy en el extranjero).
Aunque el título de la película toma como clara referencia James Bond contra Goldfinger, el argumento de Altın Çocuk mezcla la trama de ésta con Agente 007 contra el Doctor No, Operación trueno y Desde Rusia con amor. El filme estaba protagonizado por la estrella local Göksel Arsoy, que además era cantante, deportista y piloto de aviones, un actor con decenas de películas a las espaldas. Arsoy volvió para el papel en la secuela Altin Çocuk Beyrut'ta, que se desarrolla en la ciudad libanesa de Beirut.
Los responsables de la cinta, no contentos con plagiar descaradamente la trama de las primeras películas del Agente 007, copiaron la imagen del gran villano de la saga: Ernst Stavro Blofeld, para convertirle en el gran enemigo de su Golden Boy.