Netflix ha perdido 200.000 suscriptores en los primeros meses de 2022 y espera seguir perdiendo en lo que queda de año hasta llegar a los 2 millones. Una noticia que ha generado cierto revuelo puesto que, hasta la fecha, era la líder indiscutible del 'streaming'. Desde la compañía aseguran que se debe a factores como la competencia, las cuentas compartidas, el equipamiento tecnológico de los hogares y crisis globales como la pandemia o la guerra de Ucrania. Elon Musk, visionario tecnológico y director de SpaceX y Tesla -así como la persona más rica del mundo actualmente- cree que se debe al "virus 'woke".
"El virus 'woke' está haciendo que Netflix no se pueda ver", ha escrito el empresario en un 'tweet' en respuesta a la noticia de la crisis del servicio de 'streaming'. No ha añadido ningún detalle a la afirmación, más que estar de acuerdo con un usuario que decía que el "virus 'woke' es la mayor amenaza de la civilización". ¿A qué se refiere con estas palabras?
"Woke" es un adjetivo que se utiliza para alertar de injusticias en la sociedad, especialmente en cuanto al racismo. Se utiliza desde hace tiempo para hablar de la lucha por los derechos de la comunidad negra en Estados Unidos, pero también se ha aplicado al movimiento feminista y LGBTQ+. Por lo tanto, la sociedad 'woke' es una sociedad preocupada por los problemas sociales y dispuesta a denunciar todo aquello que no sea justo.
Musk lo utiliza como algo despectivo y podría decirse que está en contra de que todo tenga que ser políticamente correcto. No menciona ninguna película o serie en particular pero ha mostrado estar de acuerdo con un usuario que señala que la industria está aterrorizada por ofender a alguien y ofrece contenido muy poco original. "¿Pueden hacer, por favor, ciencia ficción y fantasía que, al menos, sea sobre ciencia ficción y fantasía?", se quejaba en Twitter.
Según el presidente de SpaceX, los espectadores están cansados de ver contenido poco original y nada arriesgado, hecho únicamente para ir de acuerdo con los valores sociales actuales. La compañía ha dado varias razones para la disminución de sus suscripciones y ninguna de ellas tiene que ver con el contenido. En su lugar, culpan a la compartición de cuentas -lo hacen más de 100 millones de hogares-, a la fuerte competencia que no ha hecho más que aumentar en los últimos años y a factores que se les escapan, como la conexión de los hogares, la COVID, el lento crecimiento económico o la guerra en Ucrania.
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