Un emotivo clásico lleno de fantasía y sentido de la maravilla, que ha marcado la infancia de varias generaciones que se lo han ido pasando como rito de unión familiar. 40 años desde su estreno en Estados Unidos y sigue funcionando como el primer día, teniendo además influencia en obras actuales como Stranger Things. A estas alturas, E.T. El Extraterrestre es una película inapelable.
Una obra totalmente trascedente en una filmografía llena de obras maestras como es la de Steven Spielberg. El director tuvo que renunciar a dirigir Poltergeist (Fenómenos extraños) para poder centrarse en esta luminosa historia que bebe mucho de su historia personal. Tras el divorcio de sus padres cuando era niño, el joven Spielberg se inventó un alien imaginario que le hacía compañía y llenaba el hueco tanto del hermano que nunca tuvo como del padre que sentía que había perdido.
Ese visitante del espacio exterior cobraría vida en forma de muñeco animatrónico equipado con la tecnología más puntera en aquel momento. Con esa herramienta se podía sacar adelante esta fascinante historia de amistad, conexiones que superar barreras, el poder de la inocencia infantil y luchar por defender a aquellos que lo necesitan. Los valores que Spielberg quiere transmitir son tan elementales como efectivos, de ahí que siga emocionando tantos años después.
'Dumbo', 'E.T', 'Bambi'... 10 películas infantiles que nos traumatizaronEl protagonista de esta historia que marcó la infancia de toda una generación es Elliott, un chico tímido y solitario, que de repente oye un misterioso ruido en su jardín. Para su sorpresa, un extraño ser del espacio exterior está escondido allí, y se ha perdido de su grupo en plena misión de exploración por nuestro planeta. Con la ayuda de su familia intentará refugiarlo de las autoridades y tratará de ayudarle a regresar a casa.
La película consigue brillar también gracias a un muy bien escogido reparto infantil, que posteriormente crecerían para tener carreras muy notables como son los casos de Henry Thomas o Drew Barrymore. Estos jóvenes interpretes consigue vender la mirada inocente propia de la infancia, sin que por ello resulte excesivamente cargante como a veces sucede en películas que dependen demasiado de niños para sus historias. Spielberg saca oro de estos pequeños talentos.
12 escenas de películas que siempre nos hacen llorarPero es difícil pensar algo de esta película de lo que Spielberg no saque algo deslumbrante. La propia banda sonora de John Williams es algo magistral e icónico, y resulta impactante a pesar de que ya deberíamos estar acostumbrados a la excelencia de su música, especialmente cuando se junta con el director de Cincinnati. El propio cineasta sabe que tiene tal maestro a su lado que hasta se permite rodar una secuencia al ritmo de una de las sinfonías que le presentó, en lugar de al revés como suele ser habitual. Y, curiosamente, esa secuencia es la más recordada de la película.
El perfecto manejo del tono, la puesta en escena sublime y el ritmo infatigable son elementos que se dan por supuesto en casi todas las películas de Spielberg, pero destacan notablemente en E.T. El Extraterrestre. Son la guinda de un pastel muy dulce y cremoso, aunque no excesivamente empalagoso, que sigue emocionando a padres e hijos con el paso de los años y los visionados. Si es uno de esos clásicos que todavía tienes pendiente, es buen momento para ponértela.
Puedes ver E.T. El Extraterrestre en Netflix, Amazon Prime Video y Movistar+.
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