Seguro que más de una vez has oído hablar del piloto sin emitir de la ficción de Jim Parsons, una historia en la que veíamos a Leonard y Sheldon intentando dejar su esperma en un banco de esperma para conseguir dinero. A su regreso a casa conocíamos a dos mujeres, Gilda (Iris Bahr), una compañera de la universidad de ambos y a Katie (Amanda Walsh), una joven a la que invitan a su casa tras encontrarla llorando en la calle porque su novio la ha dejado.
Esta historia fue rechazada en favor de una que sustituía al personaje de Katie por el de Penny, al tiempo que incluía a Raj y Howard en la trama.
El caso de Las chicas Gilmore es quizá el menos sorprendente, en cuanto a que la idea de los King se mantuvo prácticamente intacta en su llegada a la televisión. Este episodio piloto tuvo que ser grabado de nuevo con cambios como la personalidad de Lorelai que era más fría, menos habladora afable como la conocemos; o los roles de Sookie o Dean que estaban interpretados por Alex Borstein y Nathan Wetherington, en lugar de Melissa McCarthy y Jared Padalecki, -señalar que Dean era introducido como el chico malo patinador-.