La octava temporada de Juego de Tronos marcará el final de una de las series más famosas y aclamadas de la historia, pero para llegar a ese momento los protagonistas han vivido muchas emociones. Kit Harington es uno de los que ha tenido que lidiar con más "problemas", con más locuras de los fans y más preguntas de los medios de comunicación.
Su personaje, Jon Nieve, fallecía al final de la quinta temporada dejando a todos los espectadores boquiabiertos. ¿Qué sucederá ahora?, ¿le resucitarán?, ¿hemos perdido a nuestro rey? Estas y más cuestiones surcaban las mentes de los ansiosos fans que solo querían saber qué sucedía con uno de sus personajes favoritos.
Años después, Harington ha reconocido para Variety -que recoge EW-, que esa no fue una época fácil en su vida. "Mi periodo más oscuro fue cuando la serie comenzó a ser demasiado sobre Jon, cuando murió y luego lo resucitaron. Realmente no me gustaba que el foco de toda la serie estuviese sobre Jon, incluso pensaba que estaba invalidando mi problema de ser la conexión más débil porque las cosas eran sobre Jon. Cuando te conviertes en el 'cliffhanger' de una serie de televisión, o de una serie de esta altura, el foco sobre ti es aterrador".
El actor ha asegurado que fue en ese momento cuando comenzó a ir a un terapeuta y a hablar con las personas que le rodeaba. "Me sentía muy inseguro, y no estaba hablando con nadie. Me sentía muy agradecido por todo lo que tenía, pero al mismo tiempo increíblemente preocupado sobre si podía actuar".
Con el final de la serie tan cerca, Harington ha tenido unas palabras para el adiós de su personaje, dejando claro que esta última etapa está llena de emoción: "El final del viaje de Jon, sea cual sea,... Yo estoy satisfecho con el final de su historia".
