Johnny Depp
Teniendo en cuenta el delicado estado en el que se encuentra su carrera -y su propia vida personal, con la polémica de su divorcio con Amber Heard aún coleando-, el actor más misterioso de Hollywood no pasa por el mejor de los momentos, y quizá tampoco le ayude para distraerse ver alguno de sus filmes. "Cuando me veo actuar en papeles así, pienso que es asombroso que haya sido capaz de hacerlo. En serio, no sé cómo sigo teniendo trabajo", declaró en cierta ocasión. "Prefiero vivir en la ignorancia. Una vez que has terminado con tu personaje, ya no es asunto tuyo".
Reese Witherspoon
La actriz no ha hecho más que aumentar su prestigio desde que comenzara a trabajar a mediados de los noventa y, sin embargo, admite que lo pasa realmente mal cuando se tiene que ver a sí misma en pantalla. "Nunca quiero ver mis propias películas, porque entro en una espiral de auto-odio", declaró en una ocasión la ganadora del Oscar por En la cuerda floja. "¡Es una tortura! ¿Por qué querrías verte a ti mismo siendo estúpido y pretendiendo ser algo que no eres?"
Javier Bardem
Nuestro actor más internacional ha mostrado que es, ante todo, un trabajador polifacético, a quien no se le resiste ningún papel. Lo cual es bastante irónico, pues no es capaz de ver sus propias películas una vez su trabajo ha concluido, debido a la impresión que le produce verse físicamente en ellas. "No soporto esa jodida nariz, esa jodida voz, esos ojos ridículos", se lamenta. "Pero, mientras actúo, no soy consciente de estas cosas; hay algo más poderoso que necesito expresar".
Tom Hanks
Ni siquiera un intérprete tan querido como Tom Hanks se libra de tener ciertos complejos a la hora de verse en pantalla. De hecho, sólo le gusta volver a ver de vez en cuando la película que dirigió, The Wonders, en la cual tenía un papel secundario. "Claro que no veo mis propias interpretaciones, ¿quién hace eso?", dice el protagonista de Forrest Gump. "Eso sería una locura. No necesito ver esas películas más de una vez. Mi interpretación no va a cambiar por más veces que la vea". Razón no le falta.
Julianne Moore
Considerando la admirable filmografía de la actriz resulta difícil de creer que no haya tenido nunca la tentación de volver a ver alguna de sus películas, pero eso es exactamente lo que dijo hace varios años: "Ni siquiera me siento a verlas durante la 'premiere'". El motivo es mucho más simple que el hecho de que sienta cierta inseguridad con su trabajo. "Me gusta más participar en el filme que verlo luego. Apenas me interesa el producto acabado".
Jesse Eisenberg
El actor que recientemente interpretó a Lex Luthor en Batman v Superman: El amanecer de la Justicia parece tener ciertos problemas a la hora de sentarse a comprobar cómo ha ido su trabajo. "No me gusta verme a mí mismo. A los otros actores sí, pero eso lo puedo hacer durante el rodaje". De hecho, durante la promoción de su última película, se mostró incluso más nervioso con la perspectiva. "Pienso todo el rato que parezco un idiota. Imagínate el trauma si la veo en IMAX."
Nicole Kidman
Las únicas películas suyas que ha visto Nicole Kidman son Moulin Rouge y Australia, y sólo por hacerle un favor a su amigo Baz Luhrmann, director de ambas. De hecho, su experiencia al ver esta última fue tan traumática que una vez tuvo lugar la 'premiere' en Sidney se negó a seguir participando en la promoción. "Estaba todo el rato como '¿hay algo que haga bien en esa película?'. Me resultaba totalmente imposible conectar con el personaje como espectadora", afirma la compungida actriz recordando esa noche.
Joaquin Phoenix
Al actor no le basta ser uno de los más talentosos de la actualidad para no tener intención alguna de ver cómo se desempeña en pantalla. Durante la promoción de The Master, el carismático intérprete lo confirmó con su habitual vehemencia: "No quiero verme tal y como la cámara me ve. No quiero ser objetivo". Lo que no quiere decir, claro, que de vez en cuando no sienta una pizca de curiosidad: "Sí, durante un segundo, pero no tardo en decirme que no a mí mismo. Creo que incluso podría ser contraproducente para mi trabajo".
Jared Leto
Cuando, en 2013, Jared Leto asistió como invitado al programa de Conan O'Brien, no fueron pocos los que se sorprendieron de que éste se tuviera que cubrir los ojos con la chaqueta del presentador al emitirse un 'clip' de su última película, Dallas Buyers Club. En efecto, el actor no soportaba ver su propia interpretación, aun cuando ésta fuera galardonada posteriormente con el Oscar. "¡No puedo ni escuchar mi propia voz!", dijo, con una inseguridad que a buen seguro se evaporaría durante el rodaje de Escuadrón suicida. Este último filme, por cierto, se estrena el próximo 6 de agosto, y en él interpreta nada menos que al Joker.
Meryl Streep
Sí, aunque parezca mentira, la mejor actriz de la actualidad -al menos, según su número de Premios Oscar- también pertenece a ese colectivo de actores sin mucho interés en verse trabajando. Sin embargo, en este último caso quizá no se trate de inseguridad, sino de falta de tiempo. Lo cierto es que Meryl Streep no para de trabajar, y detenerse a ver anteriores películas no parece formar parte de sus prioridades. "No, no lo hago. Simplemente miro adelante".