Micheline, de 81 años, sueña con orgasmos y dice a quien quiera escucharla que se está muriendo de deseo. Francis, de 70 años, veterano militante, ataca sin tregua los tabúes que rodean a la vejez. Yves, de 68 años, se siente como una concha en un mar tempestuoso y está desesperada por encontrar el amor. En un mundo que subestima el poder de las personas mayores, forman parte de un grupo de activistas que desafían los prejuicios, se atreven a reinventar la sexualidad y el amor, y a repensar la vejez.