En 1993, cuatro adolescentes nigerianos que hacían campaña a favor de un Movimiento para la Actualización de la Democracia (MAD) suben a bordo de un avión que viajaba de Lagos a Abuja. A mitad de camino, los hombres del MAD secuestran a la tripulación y a los pasajeros. Tras varios intentos de obligar al piloto a desviar el vuelo a Fráncfort para expresar su descontento con los acontecimientos que siguieron a las elecciones del 12 de junio, en las que Moshood Kashimawo Olawale Abiola fue elegido democráticamente presidente de Nigeria, barajaron la posibilidad de aterrizar el avión en Niamey (República del Níger), donde lo mantuvieron secuestrado durante 70 horas y exigieron la instauración de la democracia en Nigeria.