Antonia es una ama de casa ejemplar de 65 años, dedica sus días a las tareas del hogar y a cumplir con las necesidades de su familia. Sin embargo, detrás de su apariencia amable y servicial, esconde una obsesión peculiar: los cuartos de baño.
En estos espacios, donde puede decir "ocupado" y lograr un momento de soledad, encuentra el refugio necesario para entregarse a su verdadera pasión secreta: la escritura. Entre inodoros y cañerías, Antonia experimenta una libertad creativa que le permite escapar de la rutina.