Crítica de SensaCine.com para Blown Away (Volar por los aires): De bomberos y terroristas

Volar por los aires, tres años después, parece una especie de respuesta o complemento a Llamaradas, de Ron Howard, pero mientras esta introducía elementos de thriller dentro de un drama familia y de análisis del cuerpo de bomberos de una pequeña localidad, la película de Stephen Hopkins prefiere centrarse en la acción y en el thriller puro entregando, además, un vehículo, en teoría, de lucimiento de sus dos actores protagonistas, Jeff Bridges y Tommy Lee Jones. Ambos consiguen otorgar personalidad a un producto, nunca mejor dicho, basado en la pirotecnia más absoluta en cuanto al terreno visual, introduciendo los consabidos elementos dramáticos (vía relación familiar) que devienen en meros injertos de relleno que preceden a la acción.

El trabajo de Hopkins es meramente funcional y convencional pero consigue su propósito, entregar un producto bien empaquetado que entretiene hasta un determinado momento, cuando uno se da cuenta de que la historia, que no da para mucho, se encamina hacia las dos horas de duración.

A favor: Aunque no son sus mejores interpretaciones, Bridges y Lee Jones.

En contra: La duración, a todas luces excesiva.