La escena en la que Danny DeVito despierta Matt Damon de su sueño en el banco, se rodó a toda prisa para sorpresa de Damon, que en realidad se había quedado dormido después de una escena.
Francis Ford Coppola animó a Matt Damon a permanecer en el apartamento de su personaje para ayudarlo a sumergirse en el papel.
Matt Damon utilizó un método de actuación, en la escena en la que se encuentra frente a Jon Voight en la mesa en la deposición, colocándose piedras en el bolsillo de su traje para sentirse más incómodo.
Esta fue la última película que hizo Teresa Wright.